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Revelaciones de una "caja negra"

Americanos ganan el Nobel de Medicina por estudios sobre «el reloj biológico»

«El reloj biológico» –tema que les otorgara a tres investigadores americanos el Nobel de Medicina este año-es responsable por las variaciones diarias en el metabolismo. Su alteración crónica está relacionada con enfermedades graves, incluyendo el cáncer.

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Le regulación de los horarios de sueño es el ejemplo más obvio de la importancia del ritmo circadiano  para el funcionamiento del organismo humano. A lo largo de un periodo aproximado de 24 horas, los genes regulan la liberación de la hormona melatonina. Durante la noche, en la oscuridad, los niveles aumentan y con la claridad, bajan. Pero el reloj biológico –tema que les otorgara a tres investigadores americanos el Nobel de Medicina este año-es responsable por las variaciones diarias en el metabolismo. Su alteración crónica está relacionada con enfermedades graves, incluyendo el cáncer. -Experimentos con animales mostraron que la destrucción del reloj biológico es incompatible con la sobrevivencia, no por casualidad la academia resolvió premiar al trio americano-comentó el doctor en neurociencia Fernando Mazzilli Louzada, docente del departamento de Fisiología de UFPR.-Pensar en los horarios de sueño es más evidente pero ahora sabemos , por ejemplo, que las situaciones crónicas de alteración en el ritmo circadiano están relacionadas con el aumento de riesgo de sufrir cáncer de mama. El ritmo circadiano está directamente relacionado con la iluminación del ambiente. Está regulado por el núcleo supraquiasmático, estructura en el cerebro que recibe informaciones de los fotorrecepctores de la retina. Las personas ciegas  generalmente presentan problemas con el reloj biológico ya que no pueden obtener las señales de claridad. Al oscurecerse el núcleo supraquiasmático envía una señal para que la glándula pineal segregue melatonina. Esa mecánica también reduce la temperatura corporal y la presión sanguínea y todo es controlado por los genes siendo que el funcionamiento del primero de ellos-“Period” –fue descripto por dos de los laureados de este año Jeffrey Hall y Michael Rosbash. Michael Young descubrió el segundo gen, el “Timeless” que actúa como el “Period” en la regulación del ritmo circadiano. Por mucho tiempo se creyó que el sueño de las personas estaba regulado por el hábito pero esos descubrimientos mostraron que se trata de una cuestión genética. Algunas personas se encuentran más dispuestas parte de la mañana, otras por la tarde o  noche. -Algunas personas son matutinas, otras vespertinas y esas características están relacionadas con una predisposición genética-explicó Louzada. Alteraciones en el ritmo circadiano pueden provocar graves disturbios en el sueño. Eso puede ser experimentado por viajes para regiones con diferentes husos horarios, lo que se conoce como jet lage.Ese problema también es experimentado generalmente de modo más leve con la introducción del horario de verano. Personas que trabajan en turnos nocturnos o con rotación también experimentan esa desregulación en el reloj biológico que puede manifestarse por irritabilidad, insomnio y dificultad de concentración. -Pero el rimo circadiano tiene implicaciones que van más allá del sueño. Está relacionado con la alimentación por ejemplo y con la forma de nuestro organismo lidiar con el consumo energético y almacenamiento de la grasa. — dijo Louzada. —En la naturaleza ella es la que regula el periodo de reproducción de los animales y el florecimiento de las plantas. Es por la percepción de la duración del día que los ritmos estacionales son dictados. El premio Nobel de medicina fue concedido a tres científicos americanos: Jeffrey C. Hall, Michael Rosbash y Michael W. Young. En 1984 Hall y Rosbasch consiguieron aislar el “Period” en moscas drosófilas y posteriormente descubrieron que los niveles de la proteína asociada a él bautizada como “PER” variaba a lo largo del día. En 1994,  Young descubrió el “Timeless”. Para Michael Hasting, del Consejo de Investigaciones Médicas del Reino Unido los estudios realizados por el trío abrieron el camino para un nuevo campo de estudio para la biología y la medicina. -Hasta entonces el reloj biológico era una caja negra-avaló Hasting —Nosotros no sabíamos nada sobre su mecanismo de acción pero ahora que ellos consiguieron identificar los genes que regulan el reloj biológico las cosas cambian. Cuándo uno tiene información sobre los genes., puede lograr lo que quiere.

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