Boca le empató a Palmeiras 2 a 2 en San Pablo y tiene sabor a triunfo, ya que con el 2 a 0 en Buenos Aires clasificó el equipo de la Ribera a la final, la que jugará frente a su tradicional rival, como lo es River.
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El encuentro comenzó con un gol de Bruno Henrique a los diez minutos que fue anulado por el VAR por posición adelantada. Eso puso un poco de nervio en el partido, que siete minutos después tuvo el gol de Boca; un desborde de Villa por derecha y el pase bajo para Wanchope Ábila que la manda a guardar en el borde del área chica. El 1 a 0 obligaba a Palmeiras a convertir cuatro goles, lo que parecía muy difícil que sucediera, así se fueron al descanso.
El segundo tiempo tuvo a Palmeiras como protagonista, fue a buscar el empate que necesitaba rápidamente, el empate llegó por parte de Luan a los 53 minutos, para que Gustavo Gómez aumentara de penal, el local se ponía 2 a 1, y queda a dos goles de poder ser finalista, pero eso parecía lejos de pasar.
Boca defendió con ahínco, no trabajaba bien así el ataque, pero defendiendo pasaba a la final.
Pero entró Nicolás Benedetto que a los 70 minutos pusó el 2 a 2 y sentenció el partido definitivamente. Un pase de Pablo Pérez que tocó a Benedetto que controló y sacó el tiro de afuera del área, bajo, fuerte cruzado, para convertir y liquiedar el partido.
La Copa Libertadores tiene una fínal histórica e inédita jugarán Boca – River, dos de los grandes de Argentina en un superclásico. Será la última vez que la final de la Libertadores se juegue en dos partidos, ya que en el 2019 pasará a ser final única, en esta horrible costumbre que tenemos los sudamericanos de copiar a los europeos.
La primera final será el miércoles que viene en la Bombonera, la segunda está por determinarse.
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