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Las guarniciones policiales de dos departamentos de Bolivia se amotinaron en la noche del viernes con proclamas contra el gobierno de Evo Morales, aumentando la tensión política que vive el país por la ola de protestas contra la reciente reelección del presidente.
«Esta es una protesta contra el comandante pero también es en repudio al gobierno. Es un motín de toda la policía del departamento porque el gobierno no nos hace caso hace muchos años», dijo con el rostro cubierto un representante de los amotinados en Cochabamba (centro) que conversó brevemente con la prensa en la puerta de su cuartel, mostraron reportes de televisión.
Cochabamba fue escenario del primer motín policial, transmitido en vivo por las televisoras locales, seguido poco después por los policías de base de Sucre, capital del departamento de Chuquisaca (sur).
En ambos casos, los voceros de los amotinados dijeron que no estaban dispuestos a seguir participando en las tareas de contención a los manifestantes opositores ni de disolución de violentas peleas callejeras entre opositores y oficialistas.
La televisión estatal informó que el ministro de Gobierno Carlos Romero estaba reunido en la noche con el alto mando policial, que horas antes había emitido un comunicado llamando al cese de la violencia en las manifestaciones.
Las protestas en Bolivia comenzaron hace casi tres semanas, disparadas por denuncias opositoras de un presunto fraude en favor de Morales en las elecciones del 20 de octubre.
