En mayo, el senador nacionalista Javier García presentó un pedido de informes sobre 750.000 municiones de punta hueca ingresadas al país por el Ministerio del Interior. Ese tipo de balas están prohibidas por derecho internacional humanitario de la Convención de Ginebra, y por un decreto en Uruguay, el que se había levantado de manera provisoria por resolución presidencial del 8 de noviembre de 2016, por única vez. Este martes, el ministro Eduardo Bonomi concurrió a la comisión de Defensa del Senado donde fue convocado por este tema. Al concluir la reunión, Bonomi habló con la prensa, defendiendo el ingreso de esas municiones por única vez para que «la Policía no quedara sin balas», aclarando que ese tipo de munición «evita daños a terceros» porque no puede atravesar a tres personas. Teniendo en cuenta que las municiones ingresaron al país, estuvieron guardadas en un depósito de la Guardia Republicana hasta que se obtuvo la autorización de Fiscalía, Bonomi dijo: «Se esperó a que se autorizara su uso. Entonces, hablar de ingreso ilegal, de contrabando….». Según el ministro, «en la prensa aparece que los delincuentes tienen mayor poder de fuego que la Policía». Para Bonomi, «el uso de las palabras ‘contrabando’ e ‘ilegalidad’ es improcedente, es una irresponsabilidad y un atrevimiento», concluyó.
Hacete socio para acceder a este contenido
Para continuar, hacete socio de Caras y Caretas. Si ya formas parte de la comunidad, inicia sesión.
ASOCIARME