Luego de que en un artículo reciente del diario El País se colocara bajo la lupa de la opinión pública la eficacia del Hospital de Ojos José Martí, así como la capacitación del personal técnico de la brigada cubana que le devolvió la vista a 90.000 personas, en su mayoría de bajos recursos, hay quienes afirman que la denominada Operación Milagro es víctima de una estrategia política malintencionada que tiene como cómplices a los medios hegemónicos de comunicación.
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El citado medio de prensa publicó un artículo titulado «La operación milagro rodeada de dudas: médicos cubanos pierden prueba de la Udelar» para luego dar a entender en su copete que estos profesionales operaron durante dos años sin estar capacitados para hacerlo.
Caras y Caretas Portal dialogó con Sixto Amaro, director representante del sector pasivos del BPS, quien transmitió que el debate que se generó en torno a los oftalmólogos cubanos no se trata de una casualidad. «Sin la mas mínima duda este tipo de noticias son parte de una campaña para tratar de desprestigiar una formidable labor medica de la brigada cubana cuyos resultados positivos están a la vista», afirmó en referencia a las 90.000 intervenciones exitosas.
En este marco, Amaro exhortó a rescatar la verdadera noticia, la cual esta ligada a un verdadero milagro mediante una política publica que creó el primer hospital de ojos que tiene nuestro país mediante un convenio que realizó Uruguay con la isla cubana. «Es necesario hablar de la noticia sana, no de aquella mal intencionada que es parte de una política agresiva hacia los oftalmólogos cubanos. Hubo 90.000 uruguayos que recuperaron el derecho humano de volver a ver y jamas hubo ninguna queja», valoró.
«Para esa prensa que hoy ataca el Hospital de Ojos, las 90.000 operaciones nunca fueron noticia; si hubiera existido una operación mal hecha, lo hubieran tenido en la primera página durante un mes», agregó.
Por otro lado, el jerarca subrayó la participación social en este programa de sectores como jubilados y pensionistas de la Organización Nacional de Asociaciones de Jubilados y Pensionistas del Uruguay (Onajpu) y así como trabajadores del Pit-Cnt que fueron parte de los 200 mil ciudadanos pesquisados. «Se realizaron pesquisas en asociaciones de jubilados,capillas ,clubes sociales y deportivos, casas de familia, zonas rurales y del interior profundo. No queda lugar donde los médicos cubanos no llegaron a realizar pesquisas y operar a quienes necesitaban ser intervenidos. Se llegó a lugares donde nunca fue un medico oftalmólogo. Esa es la noticia sana», enfatizó.
Con respecto a la alusión que hace el artículo publicado en El País respecto a que los médicos cubanos operaron durante dos años sin estar capacitados, Amaró opinó que se trata de «una grosería» que afecta intelectualmente a los profesionales que llevaron adelante este programa con efectividad en el cuidado de la visión de los uruguayos.
Ademas, destacó que la brigada cubana introdujo un vínculo entre médico y paciente «lleno de ternura y generosidad» que posibilitó que quienes participaban de este programa lo hicieran con absoluta confianza. «Esa confianza ahora se quiere destruir y no es la primera vez. Recordemos que médicos cubanos sufrieron amenazas de ser enviados a juicios públicos y de ser expulsados del país. Se está tratando de destruir una de las obras sociales con mas efectividad vinculada a la salud visual de los uruguayos».
Por otro lado, el representante de los pasivos subrayó que los medios de comunicación no son los únicos en participar de este ataque, sino que «también están los médicos que cobran 1000 dolares por una simple operación de cataratas o 100 dolares por una consulta solo para determinar las falencias en la visión de los ciudadanos. Esos médicos están presentes en cada uno de los ataques a esta formidable brigada de médicos oftalmógos cubanos».
Para concluir, Amaró aseguró que el Hospital de Ojos no se va a detener y convocó a todos aquellos que participaron de la Operación Milagro a ser parte del acto en conmemoración de las 100.000 intervenciones que se cumplirán por los meses de junio o julio del año entrante.