Cerca de medio millón de sirios desplazados por el conflicto en su país han retornado a sus hogares desde el mes de Enero de este año, la mayoría en busca de familiares o para verificar el estado de sus propiedades según las informaciones de la ONU El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) constató una tendencia significativa de retorno espontáneo de los refugiados con destino a Siria en 2017. Más de 440 mil desplazados internos retornaron para su casa, afirmó el portavoz de Anur, Andrej Malhecic durante una entrevista colectiva. Además de eso, cerca de 31 mil refugiados que huían para países vecinos regresaron a Siria en el mismo periodo agrego la ONU. Ese dato eleva para casi 260 mil el número de refugiados que retornó voluntariamente para el país en guerra desde 2015. La mayoría había huido para Turquía, ciudad vecina. Cerca de 5 millones de personas buscaron refugio durante la guerra, según Acnur.Los refugiados están retornando principalmente para Alepo, Homs y Damasco. -En algunos casos su retorno está ligado a una mejoría real, o percibida por condiciones de seguridad en algunas partes del país-explicó Andrej Mahecic. Delante es esos frecuentes regresos, Acnur comenzó a aumentar su capacidad de operación en Siria con el objetivo de elevar su asistencia en el local junto con otras organizaciones humanitarias. La agencia también reforzó su actividad de control de frontera analizando el movimiento de los refugiados y garantizar que retornen de forma segura para su país. Acnur también resalta que a pesar de las recientes negociaciones de paz en Astana y en Ginebra ofrecieron una esperanza creciente, la verdad es que las condiciones para que los refugiados regresen a Siria de forma segura y digna todavía no son eficaces. Desde la primavera de 2011 la guerra en Siria ha devastado el país matando más de 320 mil personas, según el Observatorio Sirio para los derechos Humanos (OSDH).El conflicto involucra muchos actores locales y grandes potencias-extremistas islámicas, rebeldes moderados y el régimen del presidente Bashar al-Assad. Muchas fueron las atrocidades relatadas a lo largo de los años. Rusia e Irán, países aliados del gobierno sirio y Turquía que apoya a los rebeldes, adoptaron en mayo en Astana, un plano para crear zonas de seguridad y una disminución de los combates en las áreas en cuestión.
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