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Editorial

Drama en cuatro actos

Con las manos en la masa

Por Alberto grille.

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Caras y Caretas Diario

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Primer acto

La renuncia o el cese del exministro de Turismo Germán Cardoso por aparentes irregularidades ocurridas en su cartera ministerial no lograron cerrar un capítulo que tarde o temprano lo llevará a la puerta de Justicia.

Una o dos investigaciones parlamentarias, un curioso incidente legislativo en el que el ministro renunciante se convierte en denunciante y denunciado, sucesivas y reiteradas publicaciones de prensa y la anunciada denuncia penal de la oposición,  mantienen al día de hoy el tema en la agenda política.

El episodio se inicia con la destitución del dirigente colorado del sector ciudadanos Martín Pérez Banchero, quien se desempeñaba como director del Turismo del Mintur.

Lo destituye Germán Cardoso, el ministro que pertenece al mismo Partido Colorado, por el sector Batllistas que lidera el expresidente Julio María Sanguinetti.

Martín Pérez denunció que el ministro pretendía que firmara contrataciones diversas que él consideraba irregulares y la destitución fue apoyada por el subsecretario, Remo Monzeglio, del grupo más estrecho del presidente Lacalle Pou e inicialmente por el propio presidente, que dijo sentirse conforme con la documentación que Cardoso le mostrara y que luego se difundiría que eran parciales.

En un curioso enroque, el ministro saliente volvió al legislativo como diputado, recuperando los fueros, el senador Tabaré Viera, de su mismo sector, asumió como Senador y Raúl Batlle, hijo del expresidente Jorge Batlle lo subrogó en el Senado, llevando como su asesor al destituido Martín Pérez de su mismo sector.

 

Segundo acto

La escena descubre a tres actores de reparto que operaban en las sombras: el adscripto del ministro, Dr. Daniel Reta, el coordinador técnico Oscar Iroldi y el asesor honorario del ministro Elbio Rodríguez, cuya participación en los incidentes serán investigados y que habrían jugado un rol preponderante en el propósito de puentear a Pérez Banchero, a quien pretendían adjudicar un papel de mero espectador.

El primero, Daniel Reta, respondería políticamente al ministro, Oscar Iroldi el, más discreto, al subsecretario, y Elbio Rodríguez es un misterio hasta ahora oculto, aunque se ha difundido que se trata de un prestamista, cuya principal ocupación es la venta de fichas para los torneos de poker online, aunque su oficina en Maldonado parecería tener un rótulo de estudio notarial.

Si bien se han mencionado numerosas contrataciones de publicidad que habrían sido objetadas por Pérez Banchero, hay una que ha adquirido más relevancia, la contratación para hacer publicidad en internet de una empresa de nombre Kirma, radicada en Estonia que fue contratada por un monto de 280.000 dólares y a la que no se le pudo transferir el dinero porque los servicios del BROU bloquearon la transferencia en el marco de sus operaciones contra el lavado de activos.

A partir de este “inconveniente” se van descubriendo cosas y se advierten zonas oscuras que aún no han sido resueltas, algunas de las cuales deberán ser investigadas por la Justicia, como las protegidas por las legislaciones de los paraísos fiscales.

Tales, por ejemplo, la dirección verdadera de la empresa Kirma, sus responsables, su relación con una empresa norteamericana radicada en Florida, que parecería tener una cuenta bancaria en Panamá que ha trascendido que podría estar a nombre del empresario Cipriani, quien prometió construir un majestuoso hotel en donde estaba el hotel San Rafael y cuyas obras aún no han sido siquiera iniciadas y quien hace unos meses se habría interesado en desarrollar casinos online desde el territorio uruguayo.

Lo que hoy si se sabe, como lo ha revelado el semanario Búsqueda, es que “la orden” de contratar a esta empresa fantasma se envió por WhatsApp el 23 de diciembre desde el Ministerio a la agencia Young and Rubicam, con la firma del adscripto del Ministro Daniel Reta y sus asesor honorario Elbio Rodríguez. También se sabe que la factura está conformada por el ministro y que los servicios contratados nunca fueron prestados.

 

Tercer acto

Daniel Reta y Elbio Rodríguez no se conocieron en las oficinas del ministro que los había elegido como sus más cercanos colaboradores, sino que al menos desde hace un año tenían el propósito de hacer negocios juntos.

Esto se evidencia en una publicación del Diario Oficial de agosto de 2020 en que se informa que la empresa Costa Naturali SA Venderá a Galiza SA el establecimiento comercial

hotel Serena sito en rambla Claudio Williman parada 24, Maldonado.

En dicha publicación se invita a los acreedores de Costa Naturali SA a presentarse de lunes a viernes entre las 14 y las 18 horas en avenida Roosevelt parada 16, edificio Stradivarius, local PB “Estudio Notarial”, Punta del Este.

Según revela el periodista Carlos Peláez, varias fuentes empresariales de Punta del Este identificaron ese Estudio como propiedad de Elbio Rodríguez. Un aviso publicado en el Diario Oficial el 14 de agosto de 2020 identifica a Rodríguez en ese local como administrador del Estudio Notarial y de acuerdo a la información registral descubre que la empresa Galiza que se propone comprar la sociedad anónima que posee la concesión del hotel La serena de Punta del este, propiedad del Ministerio de Turismo, está integrada por los dos principales asesores del ministro, Daniel Reta y Elbio Rodríguez.

Esto lo confirma el hecho de que su actual compañera, Sara Tavares, ciudadana brasileña, es la presidenta de la sociedad y como apoderados fueron designados Diego Rodríguez, hermano de Elbio, y Daniel Reta, exasesor del ministro Germán Cardoso y socio del International College.

 

Cuarto acto

Es evidente que el aviso de agosto de 2020 en el Diario Oficial, que involucra a dos allegados al exministro Germán Cardoso en la compra de una sociedad anónima concesionaria de un hotel propiedad del Ministerio de Turismo, constituye un hecho que debería ser investigado.

Obviemos el hecho de que la nota de referencia en el Diario Oficial habla de la compra del hotel y no de la sociedad snónima, lo que podemos atribuir a la desprolijidad.

La ley permite la venta de una concesión siempre y cuando la operadora siga siendo la misma empresa. Además, se debe informar al BCU y a la DGI los nombres de los integrantes de la nueva sociedad.

Pero si se pretendiera cambiar de sociedad, hay que cumplir un trámite ante el ministerio de Turismo, identificando, entre otras cosas, a los integrantes de esa sociedad .

El hotel La Serena queda a la entrada de Punta del Este en un lugar privilegiado sobre la arena y a pocos metros del agua.

Tiene una larga historia que se inicia en 1890 y un presente incierto. Es propiedad del Ministerio de Turismo y su concesión data de 2004, durante el gobierno de Jorge Batlle, con la firma del Ministro Pedro Bordaberry a la empresa Costa Naturali SA cuyo principal accionista era el controvertido empresario Eduardo Abulafia, quien había sido objeto de dos docenas de juicios, embargado por la Justicia y la DGI.

En 2015, durante el gobierno de Tabaré Vázquez, la concesión se prorrogó. El año pasado luego de un confuso incidente en que resultó muerta su esposa, pareció finalizar esta extraña aventura empresarial que se cierra con millonarias deudas que la sociedad concesionaria del hotel La Serena no puede honrar.

En este confuso final se encuadra el propósito de este señor Elbio Rodríguez, en sociedad con Daniel Retra, de comprar Costa Naturalis aprovechando su condición de asesores del Ministro de Turismo.

También se explican los movimientos de otros acreedores como el Sr. Mario Bonanatta, que asociándose con el hermano de Abulafia salda en su totalidad el pasivo y pasa a controlar Costa Naturalis, haciéndose cargo del hotel que aún permanece cerrado y haciendo algunas inversiones que aún no han sido autorizadas por el Ministerio.

Tampoco se conoce si se ha comunicado al Ministerio la nueva distribución del paquete accionario, que serían Mario Bonanatta, el hermano de Eduardo Abulafia, Julio Abulafia, el empresario hotelero argentino Daniel Ruíz, Giacomo Di Mateo y el contador Jaqui Conijesky.

De acuerdo a lo que nos informara el propio Mario Bonanata, el intento de adquirir la sociedad por parte de los asesores del ministro fue desestimado y se optó por el cambio de los accionistas, quienes se hicieron cargo del pasivo. No obstante, el diputado Eduardo Antonioni, del Frente Amplio, aún tiene interrogantes, las que también han expresado el periodista Carlos Peláez y el senador Benjamín Liberoff exsubsecretario del Ministerio de Turismo.

¿Quién está a cargo del hotel? ¿Juega algún rol en la empresa el Sr. Elbio Rodríguez? ¿Qué documentos habían firmado que justificaran la publicación en el Diario Oficial de agosto de 2020? ¿Conocía el exministro Germán Cardoso los propósitos comerciales de sus asesores?

Al cierre de esta edición parece evidente que las propias acciones de Elbio Rodríguez y Daniel Reta tienen contra las cuerdas a Germán Cardoso, que, al menos, parece haberse rodeado en su gestión de asesores demasiado “listos”.

Los fueros parecen ser la mejor defensa, además de deslindarse de sus allegados. La decisión del nuevo ministro de Turismo Tabaré Viera, alejando a los dos mencionados colaboradores, parece indicar a dónde se quiere orientar la búsqueda de culpables.

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