La Corte Suprema chilena condenó a cinco ex agentes del dictador Augusto Pinochet mediante dos fallos emitidos el pasado miércoles. Estos individuos fueron declarados culpables de dos homicidios, dos desapariciones de opositores durante la dictadura. En primer lugar, la Corte Suprema condenó a 10 años y un día de prisión a los brigadieres Miguel Krassnoff, Pedro Espinoza y al ex suboficial Basclay Zapata; y a cinco años y un día al coronel Rolf Wenderoth por la desaparición de dos estudiantes opositores en el marco de la llamada Operación Colombo. Krassnoff ya acumulaba condenas de alrededor de 120 años de prisión por los delitos cometidos durante la dictadura. Las víctimas, integrantes del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR), fueron detenidas en diciembre de 1974 y fueron desaparecidas por la Dirección Nacional de Inteligencia (Dina). El tribunal condenó al Estado chileno a abonar un total de 200 millones de pesos (300.000 dólares) a las familias en concepto de indemnización. Este operativo formó parte de la Operación Colombo, en la cual la Dina coordinó su actividad con otros organismos represivos de Argentina y de Brasil en 1975 para encubrir la desaparición de 119 presos políticos. En coordinación con varios medios de comunicación nacionales y extranjeros, el gobierno presentó estas desapariciones a la opinión pública como resultado de supuestas purgas internas en el propio MIR. Asesinato de agentes de Allende En el otro fallo ex oficial de ejército Carlos Massouh Mehech fue condenado a cinco años y un día de cárcel por el secuestro y homicidio de los integrantes del cuerpo de seguridad del presidente Salvador Allende, Wagner Salinas Muñoz y Francisco Lara Ruiz. Ambos fueron detenidos el 11 de septiembre de 1973 en la ciudad de Curicó, cuando se dirigían a la capital del país, tras haberse enterado del golpe de estado que derrocó a Allende. Posteriormente fueron trasladados a Santiago y fusilados en un campo militar del municipio de San Bernardo el cinco de octubre. El tribunal condenó al Estado a indemnizar a las familias de las víctimas con 500 millones de pesos (755.000 dólares). Estos fallos se suman a las condenas a cinco años de prisión impuestas a principios de junio por la Corte chilena a tres exagentes de la dictadura por tortura de dos presos políticos en 1974. Estos fueron el coronel del Ejército Ricardo Lauriani Maturana, al teniente coronel de Carabineros Ricardo Lawrence Mires y al suboficial Basclay Zapata Reyes.
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