Durante la jornada de clausura de su sexto Congreso Nacional, el Partido de los Trabajadores (PT) renovó a sus autoridades y eligió como nueva presidenta a la senadora Gleisi Hoffmann. El PT exigió el «cese la persecución judicial» a su fundador, la que según asegura, obedece a «planes de la derecha» para impedir que Lula vuelva a ser candidato presidencial en las elecciones previstas para octubre de 2018. Durante una breve intervención en los debates, Lula insistió en su inocencia: «En cualquier lugar del mundo, la justicia precisa tener pruebas para poder juzgar o condenar a alguien. Pero en el Brasil de hoy, es uno el que tiene que demostrar que es inocente». Además aprobó que en caso de la caída del mandatario Michel Temer, el PT presionará por unas elecciones directas y no aceptará que sea el Parlamento, como establece la Constitución, el que escoja a su sucesor.
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