Mientras varios países saludan al nuevo gobierno cubano y los mensajes de buenos deseos llegan a la isla, el secretario general de la OEA, Luis Almagro, lo condenó en un comunicado, lamentando «la transición ilegítima de la dictadura de Cuba». «El triunfo de la dictadura sobre la libertad no se llama revolución. La sucesión presidencial de la que hemos sido testigos en Cuba es un intento de perpetuación de un régimen autocrático dinástico-familiar. Se llama dictadura», considera este nuevo Almagro. Para el secretario general de la OEA, en Cuba hay «décadas de falta de democracia y vulneración de los derechos humanos y las libertades fundamentales». Luego de denunciar la elección de Miguel Díaz-Canel como antidemocráticas, afirma que el «régimen» cubano «acumula décadas de ejecuciones selectivas por razones políticas, no puede ser asimilado como un sistema cuya práctica política es aceptable en el Hemisferio». El otro Almagro, el que fue canciller de Uruguay, tenía otra visión del gobierno de la isla. Acceda a un artículo del Ministerio de Relaciones Exteriores que informa sobre un encuentro entre Almagro y Raúl Castro, realizado el 21 de febrero de 2013.
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