Por segunda vez el magnate derechista Sebastián Piñera sumió este domingo la presidencia de Chile. Considerado como la cuarta fortuna del país, prometiendo crear 600.000 empleos de calidad y aumentar los sueldos, así como revisar emblemáticas reformas de su antecesora, la socialista Michelle Bachelet. Piñera juró en Valparaíso, sede del Poder Legislativo, tras obtener 54% de los votos. La ceremonia tuvo el marco de varios presidentes extranjeros, y otros invitados, como el rey emérito de España Juan Carlos I, el presidente de Argentina, Mauricio Macri; y los del Perú, Pedro Pablo Kuczynski; de Bolivia, Evo Morales; del Ecuador, Lenin Moreno y de Honduras, Juan Orlando Hernández, entre otros. Tabaré Vázquez no concurrió. Entre las promesas del nuevo presidente se encuentra la de crear 600.000 empleos de calidad y aumentar los sueldos, así como revisar las reformas tributarias, educacional y laboral aprobadas durante el gobierno de Bachelet, entre otras iniciativas.
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