Según informó el Ministerio del Interior, durante todo el mes de enero de este año el servicio 911 contó con 263.487 llamadas por día. Las mismas se clasifican en una escala del 1 al 3 según el caso. Dentro de la categoría 1, ingresan las comunicaciones de máxima prioridad y se espera que tengan una respuesta dentro de los diez primeros minutos; en la 2, el tiempo para acudir será de quince minutos; en la 3, de veinte minutos, ya que son las consideradas como delitos menores. El problema se presenta con las denominadas “llamadas residuales”. En ellas, la persona sólo llama para insultar, quejarse o felicitar, aunque también entran en esa categoría las denuncias falsas, convirtiéndose en una modalidad grave porque se puede llegar a ocupar recursos materiales y humanos para una urgencia inexistente. En enero, hubo 128.567 llamadas residuales, de las que 10.519 fueron bromas o insultos. Con el antecedente de más de 339 llamadas por día con el objetivo de estorbar, es que se puso un filtro que bloquea los números molestos después de la tercera llamada inválida. El tiempo que ese número quedará inactivo depende de la gravedad, pudiendo ser desde una semana hasta seis meses. En estos momentos, el servicio cuenta con 895 números bloqueados.
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