En diálogo con la Secretaría de Comunicación, el director general del Auditorio del Sodre, Gonzalo Halty, dijo: «Las propuestas apostaron a democratizar un espacio que es de todos, como el auditorio. En definitiva, y por suerte, la apropiación vino de la familia y no solo por parte de los niños que vinieron a jugar”. Estimó una participación superior a los 13.000 niños solamente en la primera semana de las vacaciones de invierno.
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También destacó la articulación entre varias instituciones públicas y privadas que se dedican a la infancia como clubes de niños, hogares del Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay (INAU), instituciones sociales, centros comunales zonales y centros educativos, que incrementó el acceso a las propuestas del auditorio, tanto a los espectáculos como a las actividades didácticas programadas para las vacaciones de julio.
Además de los espectáculos, se ofrecieron talleres dirigidos por técnicos del propio teatro. Talleres de origami y pintura sobre telones de una escenografía a escala. A estas propuestas se sumaron el taller de pintura sobre la muestra “El Cerro”, del pintor uruguayo José Gurvich, en coordinación con el museo que rinde homenaje al artista, instancias del programa Ajedrez para la Convivencia en coordinación con el Ministerio de Educación y Cultura, y otros proyectos interactivos a cargo de talleristas del Plan Ceibal.
Los objetivos del Sodre se basaron en proponer actividades gratuitas e interactivas con las familias, al margen de lo espectáculos. Sobre todas las actividades se detalla información en la página web del auditorio, las inscripciones se realizan desde media hora antes del comienzo del taller; y los niños deben ir acompañados por un adulto.