Según información publicada en el Diario Registrado, el vicepresidente de la Asociación de Magistrados, Ricardo Saénz, trabajó en la instalación de la causa Nisman sugiriendo el asesinato del fiscal argentino para jugar en contra al gobierno de Cristina Kirchner.
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Sáenz siempre fue un ferviente crítico de la política de Derechos humanos y de la Ley de Medios. Según Registrado, ya en el año 2003 Saénz inició su “cruzada anti kirchnerista” pronunciándose por la constitucionalidad y validez de dos legislaciones que brindaron impunidad a los represores de la dictadura: las leyes de Punto Final y de Obediencia Debida.
El diario argentino denuncia también sus vínculos con el grupo Clarín. En 2012, el fiscal impulsó una acción penal contra el sitio web “Cuévana”, dedicado a la distribución gratuita de producciones de cine y televisión. Según el medio argentino, “Cuévana era, hasta que se inició la causa impulsada por Saénz, el principal obstáculo para el desarrollo del sistema de video on demand presentado por la empresa Cablevisión, propiedad del Grupo Clarín”.
Este favor al gran grupo mediático le fue devuelto a Saénz cuando fue designado secretario general de la ONG Argentina de Certal (Centro de Estudios para las Telecomunicaciones y el Acceso a la Información en América Latina). Esta asociación está compuesta por los principales grupos mediáticos del continente y está dirigida por el propio grupo Clarín.