Haciendo frente a los problemas de la educación

La ministra también se quedó satisfecha con las respuestas que dieron los integrantes del Codicen, quienes informaron sobre las obras que se van a desarrollar en los años venideros y dieron cuenta de las acciones de seguimiento “casi personalizado” que se hace de los alumnos que ingresaron en la enseñanza media desde 2016. “Creo que fue una buena instancia para demostrar que se está trabajando intensamente y que los problemas no se ocultan, sino que las autoridades se ocupan de buscarles solución”, apuntó.

Respecto de las críticas que se escucharon en la interpelación, Muñoz dijo que “hay situaciones que tienen fundamento y nos preocupan a todos, como el abandono de los jóvenes liceales”, pero advirtió que se está trabajando para superar este problema y remarcó que no se trata de un problema sólo de la enseñanza, sino también de los padres, de los psicólogos y de toda la sociedad.

La ministra recordó luego que ha tenido “una interpelación por año”, aunque destacó que estas instancias han permitido mostrar cuáles son los avances que se han venido realizando en los distintos temas. “Siempre se dice que las respuestas no fueron satisfactorias, pero es una muletilla que existe para todas las interpelaciones”, dijo, y advirtió que “seguramente el año que viene volveré”.

Como elemento a destacar, Muñoz señaló el hecho de que los distintos sectores políticos se hayan comprometido con la necesidad de que exista una Universidad de la Educación. “Rápidamente vamos a enviar el proyecto de ley, porque quedó claro que lo van a apoyar todos. Se trata de una entidad que es muy importante para el desarrollo de la educación, porque la solución a los desafíos que la educación tiene por delante necesita de un cuerpo de docentes del más alto nivel, consustanciados y comprometidos con el proceso de cambio”, señaló.

No al uso político-partidario

A pedido del legislador del Partido Independiente, Pablo Mieres, la Cámara de Senadores citó el miércoles 26 a Muñoz para que informara sobre la política y los resultados de la enseñanza básica y media. La acompañaron la subsecretaria del Ministerio de Educación y Cultura, Edith Morares; la directora nacional de Educación, Rosita Ángelo; el presidente de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP), Wilson Netto, y otros integrantes del organismo.

La interpelación a la ministra terminó con una declaración votada por la bancada frentista, en la que se reclamó “que la educación deje de ser motivo de utilización político-partidaria”. La moción aprobada también llamó a no estigmatizar “a todos los actores involucrados, fundamentalmente niñas, adolescentes y docentes”. Además, exhortó a que la educación “se convierta en una verdadera causa nacional”.

En su intervención final, y en línea con la declaración redactada por la coalición de izquierda, Muñoz planteó: “Que no se trate a la educación como un proceso en crisis, como un proceso en el cual las niñas, niños y adolescentes que a ella concurren no aprenden o no les sirve para nada, y que no se diga que no se trabaja por la calidad o no se incluye a los que menos tienen”. “Bastardear lo que se realiza no es más que un juego político que no afecta a los comprometidos en el quehacer político, sino a los sectores que más necesitan estár consustanciados y sentirse beneficiados por el proceso educativo”, añadió.

Muñoz pidió a Mieres “hacer juntos el compromiso de que todos terminen el primer ciclo de la enseñanza media” y reclamó “blindar” a la educación pública con un “acuerdo parlamentario”. De esa manera, aseguró la ministra, “la cohorte 2016, que es seguida paso a paso, va a terminar con éxito el primer ciclo de la enseñanza media”.

A lo largo de la sesión, la ministra también dejó en claro su respaldo a Netto y a los cinco consejeros que del Codicen, incluido el representante colorado Robert Silva.

“Operación política”

En su intervención en la cámara, la ministra recordó que volvía al Parlamento “muy poco tiempo después de la anterior interpelación”, intentando que no fuera “un enfrentamiento dialéctico” y “una serie de discursos para la tribuna”, sino “con la expectativa de que en esta instancia se aclaren algunas diferencias y se logren acuerdos sobre algunos aspectos importantes que nos permitan avanzar en la solución de los enormes desafíos que la educación”. Advirtió que con ese ánimo concurrió a otro reciente llamado en la Cámara de Diputados, pero “encontramos una interpelación con tono, talante e intenciones bien diferentes, con las conclusiones decididas de antemano y la moción de desaprobación ya redactada antes de comenzar”. No obstante, opinó que “esta interpelación y la anterior forman parte de una misma operación política”, ya que “reiteran los mismos temas y los mismos cuestionamientos”.

Luego, Muñoz repasó uno a uno los niveles de la educación en los que se ha logrado acuerdo a nivel político –inicial, técnica, formación docente, universitaria, así como en investigación, promoción e innovación–, y dijo que “también hemos logrado acuerdos en cuanto a la valoración del desarrollo del sistema privado de enseñanza, tanto a nivel de primaria y secundaria como a nivel terciario, con cuatro universidades y numerosos institutos terciarios”.

“Coincidimos en felicitarnos por lo que el país ha logrado con el Plan Ceibal, que ha significado una revolución para el sistema educativo”, así como “que se ha hecho una necesaria asignación de recursos presupuestales, con los que se mejoraron sustancialmente los salarios de docentes y funcionarios, aún insuficientes, una fuerte inversión en infraestructura edilicia, se multiplicaron las escuelas y liceos de tiempo completo y tiempo extendido, se crearon miles de nuevos grupos y se invirtió en programas educativos”, destacó.

Muñoz dijo ser consciente de que hay “desafíos enormes en la educación media” y de que hay “cierto número de jóvenes que ingresan, abandonan los estudios, o tienen malos resultados y se atrasan, mientras que otros “no llegan a completar siquiera el primer ciclo, y que un porcentaje no termina el segundo ciclo”.

Luego, la ministra dejó en claro que las autoridades conocen “la realidad y los diagnósticos”, porque “para cambiar en profundidad la educación, como nosotros queremos, se necesita conocerla”. “Escuchamos a diario a exponentes de la oposición política y técnicos repetir el diagnóstico de los problemas. Escuchamos que una y otra vez nos enrostran los problemas, las dificultades, como si nosotros no quisiéramos verlos”, pero “los conocemos. Los problemas no se enfrentan ni se resuelven lamentándose, ni repartiendo culpas”, sostuvo. “Quienes están al frente de la conducción de la educación están permanentemente analizando los problemas, e intentando identificar las herramientas para resolverlos. Pero al mismo tiempo tienen que actuar”, resaltó.

Y señaló: “La incorporación de nuevos sectores nos obliga a diversificar nuestra oferta educativa. Una oferta educativa igual para colectivos de jóvenes con necesidades diferentes no daría resultado: estaríamos reproduciendo la desigualdad existente”.

Por otro lado, advirtió que las pruebas PISA probablemente darían mejores resultados para Uruguay si se dejara fuera a algunos miles de jóvenes de entornos sociales y culturales muy desfavorecidos, “como habían sido dejados fuera desde siempre, pero nuestro compromiso no es con la OCDE [Organización para el Crecimiento y el Desarrollo Económico, que realiza las pruebas PISA], es con las familias y los jóvenes de nuestro país, y no queremos dejar a nadie afuera”.

Luego, advirtió que “la construcción colectiva de nuevos instrumentos debe procesarse con el conjunto de la sociedad: en primer lugar, con la comunidad de docentes, con los alumnos, con sus familias”, tal como lo define la Ley de Educación de 2008. “Para encarar los desafíos que nuestro sistema educativo nos plantea debemos convocar e incluir a todos. A los académicos, al mundo político. Pero, en primer lugar, a los protagonistas esenciales del proceso educativo, a los docentes. Sin los docentes no habrá nunca cambios posibles […] A todos ellos los estamos convocando para los debates del Congreso de la Educación”, agregó.

Recordó que están involucrados los partidos políticos, el Pit-Cnt, la Federación de Estudiantes Universitarios del Uruguay y organizaciones empresariales, y que los ejes temáticos serán: Educación para todos en todo el país; Universalización y calidad de la educación; Educación, diversidad y diversificación; y Desafíos de la educación.

Cambio de ADN

Finalmente, la ministra dijo que se están promoviendo cambios sustanciales para que todos los jóvenes completen 14 años de educación, desde inicial hasta terminar el segundo ciclo de secundaria, y para que reciban una educación de calidad, adecuada a las necesidades del siglo XXI. “Nos guiamos por el criterio de que la inclusión y la equidad son indicadores de calidad, de que no puede haber educación de calidad si no incorpora a todos y si no les reconoce a los sectores más desfavorecidos de la sociedad su derecho a ser protagonistas de la educación”, remarcó.

Y enfatizó: “Nos planteamos también que hay que preparar a nuestros estudiantes para incorporarse a la actual revolución del conocimiento, revolucionar la forma de enseñar y de aprender, acompañar el avance incesante de la ciencia y la técnica […] es el cambio de ADN de la educación con el que estamos comprometidos”. “Estamos trabajando y sentando las bases para ello, protegiendo las trayectorias educativas y siguiendo a cada alumno para evitar la desvinculación, trabajando para establecer este año un marco curricular de referencia nacional para la educación primaria y media como ya existe en la educación inicial”, planteó la ministra. “¿No es parte de ese proceso de cambio del ADN que más de medio millón de niños y jóvenes trabajen a diario con su computadora y acceso a internet?”, agregó.

Finalmente, Muñoz fue enfática en defender los pasos dados para superar las inequidades del sistema educativo, y advirtió que no es honesto sostener que no se va en esa dirección. “En educación, hablamos hace pocos minutos del aumento de la matrícula en todos los niveles de la enseñanza, aproximándose a la universalización efectiva, de la inversión presupuestal en la educación pública para la edificación de cientos de nuevos centros y la dignificación del salario de los docentes, de los numerosos instrumentos para evitar la desvinculación, de las escuelas y liceos de tiempo extendido y de tiempo completo, de la multiplicación de centros en las zonas con mayores dificultades, en Montevideo y en todos los rincones del país, del impacto revolucionario del Plan Ceibal”, dijo. Y remató: “En la superación de las inequidades, en lograr la inclusión de todos los niños y jóvenes en el sistema educativo, que todos terminen los 14 años de educación que la ley dispone, en eso están concentrados todos nuestros esfuerzos, y creemos que los hechos lo demuestran con mucha claridad”.