Georgina Mayo incursionó en los medios de comunicación hace 22 años mientras cursaba sus estudios en la Licenciatura en Ciencias de la Comunicación. Su primer trabajo formal fue en el diario La República. “Escribía en una hermosa página que se llamaba El Portero de la Ciudad. Iba por Montevideo y escribía sobre historias que surgían. Fue un invento de Enrique Alonso Fernández, un gran jefe de redacción”, recordó.
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La periodista contó que siempre le gustó conocer la verdad de los asuntos y que por eso decidió ser periodista. “En esencia, el periodismo es llegar a la verdad o, por lo menos, tiene que servir para acercarse lo más posible. A mí me gusta la verdad, me gusta conocer el origen de los asuntos y los contextos en los que suceden. Para informar bien, hay que intentar saber todo eso. Creo que decidí ser periodista por esas razones”, contó.
A lo largo de su trayectoria, Mayo transitó varios roles en los medios de comunicación, pero contó que lo que más le gusta es el periodismo escrito. “En televisión me siento muy cómoda, pero el medio que más me identifica es la prensa escrita. Para saber qué es periodismo, hay que vivir una redacción, hay que saber qué es cubrir un tema y conseguir las fuentes. Eso sólo se logra cuando se trabaja regularmente sobre algo. De lo contrario, nunca se obtiene confianza, que en este asunto es la base de la fortuna”, explicó.
Periodismo y política
Mayo está integrando, por primera vez, la lista para el Consejo Directivo de la Asociación de la Prensa Uruguaya (APU) y nos contó lo que significa para ella esta experiencia. “Soy socia de APU desde que soy periodista y nunca había formado parte de sus listas. Agradezco a nuestro flamante presidente, Fabián Cardozo, su confianza para que integre el Tribunal Arbitral junto a colegas muy valiosos, como Juan Carlos Giacosa y Mara De Oliveira. El tribunal funciona independientemente del Consejo Directivo y es una interesante tarea que tiene relación con el arte de dirimir”, explicó.
Con respecto a la actualidad de la prensa en Uruguay, la periodista considera que el sector experimentó cambios positivos en este último tiempo. “Creo que desde hace varios años los periodistas uruguayos (y me refiero sobre todo a los de TV y radio) repreguntan más que cuando empecé en el periodismo. Me gustan los colegas que repreguntan porque este ejercicio es esencial. Me acuerdo que Antonio Mercader dijo: ‘Acá le decís a un periodista que mañana se dará un golpe de Estado y no te repregunta’. Creo que esa realidad cambió bastante y para bien”, afirmó.
Por otro lado, Mayo evaluó los contenidos de producción nacional en nuestro país. “Los programas de televisión en Uruguay se hacen con un sacrificio enorme en cualquier canal y no me atrevería a ser muy dura a sabiendas de esa circunstancia. Debido a los costos, vemos demasiada radio en televisión y eso no es entretenido. A la televisión le hace falta más televisión”.
Los gajes del oficio
En sus años de labor periodística, Mayo confesó que nunca había sentido presión en el ámbito laboral hasta este año. “Trabajo en un medio estrictamente público (digo estrictamente porque los llamados privados también tienen publicidad estatal que les es muy necesaria) y nunca, hasta este año, recibí presiones. He hecho notas a muchos actores de todas las banderas y nunca viví lo que este año. Una cosa es el enojo y otra la presión para que se eche a alguien como me sucedió a mí”, contó la periodista haciendo referencia al caso “María”, en el cual la Suprema Corte de Justicia ordenó que una niña española retornara a su país de origen junto a su padre, el cual tenía denuncia de abuso en su contra, acusación que no fue confirmada por la Justicia.
A raíz de la polémica mediatización del caso, la periodista denunció haber recibido presiones de parte de Soledad González, Teresa Herrera y Andrea Tuana, integrantes de colectivos feministas, quienes cuestionaron su cobertura periodística sobre el tema. “Solicitaron que se me despidiera del medio; esa solicitud no tenía fundamentos, pero la presión existió”, confesó.
La periodista se ha ganado, sin dudas, un lugar en el medio. Se la caracteriza como una periodista de carácter fuerte e incisivo. Mayo nos confiesa que siempre fue respetada por sus colegas y que nunca padeció violencia de género en el trabajo.
“Nunca sufrí machismo contra mi persona en el ámbito laboral. No digo que no exista porque existe machismo en la vida cotidiana, pero si en el trabajo intentaron minimizarme por el sólo hecho de ser mujer, nunca tuvieron mucha suerte”, expresó con seguridad.
El periodismo y las redes
Con respecto a los cambios que experimentó la labor periodística en épocas de internet y redes, opinó que se debe seguir buscando la verdad en persona. “Las redes están deformando la vida de la gente. Lo peor de todo es que varios periodistas caen en lo que la gente hace en su gran mayoría: opinar sin saber mucho. La verdad, la gente que no puede llegar a las autoridades llena las redes de opiniones y preguntas, y en ese caso está bien. Pero los periodistas que pueden levantar un teléfono e investigar, y opinan como quien no lo puede hacer, contribuyen a esa deformación”.
“Hay nuevas formas de hacer periodismo y claro que internet abrió la posibilidad de que la gente seleccione informarse sólo sobre lo que le interesa. Pero no hay nuevos periodistas. El periodista debe buscar la verdad aun en época de internet y redes. De lo contrario, será otra cosa y no periodista”, sentenció.
Su pasión por el fútbol
La periodista habló sobre su pasión por el fútbol y contó que, si bien no estudió periodismo deportivo, no descarta la idea de hacerlo en algún momento. Se manifestó como “manya desde siempre” y contó que esta pasión viene del ámbito familiar. “En mi familia somos todos de Peñarol, de parte de madre y padre. La más apasionada y gritona era mi abuela materna. La visitábamos todos los domingos y cuando ganaba nuestro cuadro (seguido, como siempre), nos recibía en la puerta al grito de ‘¡Peñarol, Peñarol!’. Si no nos iba bien, se quedaba un rato largo encerrada en su cuarto sin hablar con nadie”, recordó.
Con respecto a los comentarios sobre fútbol en sus redes sociales, explicó que se toma la libertad de opinar sobre este deporte debido a que no cubre estos temas a nivel profesional. “Eso sí, si fuera periodista deportiva, diría que soy de Peñarol y no de un cuadro chico”, comentó.
Mayo manifestó que nunca tuvo problemas por opinar de fútbol en espacios que son generalmente masculinizados. “Sin embargo, en las redes sí tuve que leer mensajes amenazantes de personas que mezclaron la información sobre una causa judicial (dos homicidios en Santa Lucía, uno en grado de tentativa en 2016) con que soy hincha de Peñarol. Lamentable”, concluyó.