Según el periódico italiano Corriere della Sera, la carta dirigida al Papa Francisco contenía tres balas de calibre de 9 milímetros y un mensaje relativo al último caso de las operaciones financieras en el Vaticano, sobre el que hace algunos días se abrió un juicio contra varias personas y el cardenal defenestrado por el pontífice, Angelo Becciu.
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Esta no es la primera vez que el Sumo Pontífice recibe una carta de esta características. Si bien la amenaza queda bajo la mirada de los radares, no se considera un serio peligro para su vida.
«Se trata de un hombre ya conocido por los gendarmes vaticanos con quienes los carabineros de Milán se coordinarán para evaluar el gesto y la eventual peligrosidad”, revelaron fuentes oficiales.
Por la agilidad en la pesquisa, muchos interpretaron que se trataba de una caligrafía y estilo ya registrados por la Gendarmería Vaticana, responsable de la seguridad del Papa Francisco. Ahora, la policía busca dar con el paradero del autor ya que, como explicaron, “no es lo mismo saber que está en Francia y no en la plaza de San Pedro en Roma”.
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