Para el secretario general del Partido Comunista del Uruguay (PCU), Juan Castillo, si el vicepresidente de la Administración de Servicios de Salud del Estado (ASSE), Mauricio Ardús, “es frenteamplista y tiene algo de vergüenza, debería renunciar».
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Ardús, según una investigación de VTV Noticias, contrató a la novia de su hijo como secretaria, por un sueldo de $ 57 mil. Tras la difusión de la noticia el jerarca obligó a la joven de 18 años a renunciar.
Castillo dijo a El Observador que situaciones como esta «irritan» a la población y «entorpecen» la gestión de ASSE, «sobre todo en el contexto actual de los cuestionamientos» al organismo. Para Castillo, en el caso Ardús confluyen dos tipos de cuestionamientos: «Por un lado, hay una lupa grandota puesta sobre ASSE; por otro, una suerte de situación pública generalizada que está sensible frente a casos de parientes en distintos cargos. La suma de las dos cosas hace que esto sea lamentable».
Pese a considerar este caso como algo “menor”, sentenció que “si es frenteamplista y tiene algo de vergüenza, debería renunciar».
Otro legislador que cuestionó al vicepresidente de ASSE fue el diputado del Movimiento de Participación Popular (MPP) Alejandro Sánchez. A su juicio «deberían actuar los organismos del Frente Amplio (FA)», ya que se trata de una situación «irregular» e «inaceptable».
Distintos dirigentes del Partido Socialista (PS), al que Ardús es afín, dijeron que «desde años» no participa de ninguna instancia partidaria y ni siquiera está afiliado.