“¿Quiere agregar algo más?”, le preguntó la jueza Especializada en Crimen Organizado de 1º Turno, Beatriz Larrieu. Se trata de una pregunta habitual, que se le realiza a todas las personas que declaran -como testigos o indagados- en un proceso penal. La mayoría suelen guardar silencio. El ex vicepresidente Raúl Sendic prefirió utilizar ese derecho: “Si, quiero decir unas palabras, hace mucho tiempo que estoy esperando este momento”. “Usted sabe [en referencia a la jueza] que nunca pensé en no venir, más allá de la investidura que tuve, y siempre mande expresar a la Sede por mis abogados que tenía total intención de comparecer. Hace dos años y medio he vivido una de las peores situaciones que se han vivido en el ámbito de la política, una campaña de desprestigio muy grande; se hicieron denuncias tremendas, de corrupción, coimas, tráfico de influencias y algunas están escritas en las denuncias y otras no. Se ha hecho un daño muy grande a una persona que tiene familia, hijos y más allá de todos los lugares donde he tenido que comparecer le digo que el lugar que me ofrece mayores garantías es este”, expresó Sendic, según el acta judicial a la que accedió Caras y Caretas Portal. Y continuó: “No solo se me ofendió a mi y mi familia y a mis posicionamientos políticos, sino también y me duele en el alma, se hizo un daño a la empresa, porque la marca de la empresa costo mucho construirla con los años y no solo es mérito nuestro, sino de los trabajadores y la sociedad que la defendió. Yo he pensado que en la Comisión Investigadora muchos de los gerentes de Ancap han sido maltratados y cuando he leído las actas, me enorgullece como defendieron la empresa y hay gente que dejó la vida, como Hugo de Melo, que fue gerente del Área de Relaciones Públicas y a la contadora Silva”. “Los dos murieron trabajando en Ancap, no en su casa. Hugo de Melo murió cuando íbamos a ponerle la luz a Pepe Nuñez y tuvo un accidente automovilístico y falleció en el acto; Helena Silva, gerente de Servicios Corporativos, días enteros de negociaciones con los cañeros y murió en medio de una reunión en la empresa”, recordó. “Esta es una empresa que va desde un peludo cortando caña en Bella Unión hasta hoy un ingeniero haciendo una presentación en Londres o un buzo sumergido en la bolla petrolera o al muchacho que le entrega la garrafa en su casa, es una empresa de esa dimensión. Hay 8 mil trabajadores en las estaciones de servicio, hay 4 mil en Bella Unión y hay entre 18 o 20 mil personas vinculadas a la empresa y en el afán de enfrentamiento político le hemos hecho todos un daño muy grande a la empresa”. “Se ha preguntado donde están los 800 millones de dólares y hoy explicamos como fue el proceso de capitalizaciones y hoy mencioné y reconocía cuando los propios ministros de Economía reconocen que no se pueden trasladar a las tarifas y eso generó perjuicios importantes. Cuando se pregunta por esos 800 millones, está en la gente que no pago un combustible más caro, porque el precio de los combustibles, el 45% es impuesto y en el gasoil es del 30%, y esto no es de Ancap, pero ocupa parte del precio. En los últimos tres años cuando la empresa estaba en déficit, el Tesoro Nacional recibió 2.400 millones de dólares”, aseguró. Sendic aprovechó esta instancia para referirse a algunas de las denuncias: “Si analizamos Exor, la cancelación anticipada de la deuda dejó 400 millones (de dólares) de ganancia, el acuerdo con Petroecuador dejó 6 millones de dólares de ganancia, en materia de biocombustibles en un año se sustituyeron 240 mil toneladas de dióxido de carbono, que no se emitieron a la atmósfera gracias a la utilización de biocombustibles. Hoy tenemos varias de miles de hectáreas producidas en el país”. “Y por lo tanto, más allá de todos los errores, que capaz que los cometimos porque somos humanos, le puedo asegurar en lo personal, que tengo el orgullo de ser hijo de quien soy, de tener dos hijos de los que me siento orgulloso, tengo el orgullo de haber sido diputado, senador y vicepresidente, pero uno de los orgullos más grande que tengo es haber sido presidente de esta empresa, que es uno de los activos más importantes del país y es el escudo que tiene el Estado, que representa a los pobres, que son los que necesitan ese escudo”. “Y me siento orgulloso de todos estos proyectos, que se pensaron a mediano o largo plazo, pensamos que era necesario desarrollar estas inversiones con acuerdos y errores, con demoras y con costos que no se podían calcular desde el principio y siempre actuamos con la mayor honorabilidad posible y si quieren pueden revisar todas mis cuentas e ingresos y de todo mi sector político. Tengo el orgullo de salir de la actividad política con la misma pobreza que entre. La riqueza que tengo es el orgullo de mi tarea cumplida con la mejor de las intenciones y con la idea de estar a la altura del cargo que se me asigno”, concluyó Sendic.
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