El titular de la Cámara de Representantes recibió a Caras y Caretas en su despacho del palacio Legislativo para hablar de la gestión parlamentaria y la relación con la oposición la que entiende “es una para algunas cosas, pero para otras no tanto”. Llamó a no caer el el electoralismo de los partidos opositores y a preparar a la fuerza política para un cuarto gobierno del Frente Amplio.
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-Es inminente el ingreso del proyecto de Rendición de Cuentas al Parlamento, ¿como ha sido el proceso de diálogo en la interna del Frente y como será con la oposición?
-Bien vale la pena hacer un repaso del camino que hemos seguido. Primero una consulta del presidente (Tabaré) Vázquez a la fuerza política, esta envío sus orientaciones al gobierno para que este las reflejara en el proyecto, después vino una discusión en cuanto a las grandes líneas en el Consejo de Ministros sobre si iba a ser por un año o por tres. Después ayer (por el martes) con la fuerza política y hoy (por el miércoles) con los parlamentarios. Todo antes de que ingrese formalmente el proyecto con lo cual queda a las claras que hay un proceso de conversación interna en el gobierno y el contenido de la rendición viene en línea con los objetivos programáticos del Frente Amplio, con la cautela de los tiempos que se viven en la región y de asegurar que lo que nosotros nos comprometemos lo vamos a llevar adelante. Y en ese sentido van las grandes líneas de la Rendición de Cuentas, que después de estas presentaciones e intercambio irá a la conversación con la oposición, que eventualmente es mayoría en la Cámara de Diputados, generándose un escenario nuevo e inédito en los últimos 30 años en el país.
-Por lo que se conoce del proyecto hay avances, por ejemplo en lo que refiere a recursos para la educación…
-Se profundiza la línea de los gobiernos de izquierda que asumieron con el 3.2 de asignación presupuestal a la educación de un Producto Bruto Interno vapuleado por la crisis a un Producto hoy bastante más alto y que tiene como característica el creciente gasto o inversión que hace el Estado en materia de educación.
A mi me gustaría más que el debate estuviera mucho más instalado en los contenidos de la educación que en los porcentajes, creo que si solo se centra en si vamos al 6 estamos mercantilizando un debate que debe darse en otros términos. No significa esto que lo económico no sea un factor fundamental, que los docentes den clase de buena calidad y que la infraestructura física este en condiciones para que los estudiantes puedan estudiar pero el debate fundamental está en los contenidos educativos.
-La oposición ha reiterado que no está dispuesta a votar más impuestos, pero el proyecto contiene, por ejemplo, un impuesto a los juegos de azar, ¿cómo se abordará este tema, porque la oposición no lo votaría?
-Es posible, vamos a ver que pasa. Yo espero que no porque en realidad no estamos yendo a tributos que tengan impacto indirecto ni directo en la población. Estamos hablando de los juegos de azar, y algunos de ellos no todos, porque hay una parte que no se pueden gravar por los contratos que tiene el Estado con algunas de las empresas en algunas actividades….
-El caso de la hípica…
-Si. En lugares donde hay contratos que si el Estado los modifica puede darse un perjuicio mucho mayor que cualquier tipo de beneficio. Por lo tanto creo que es una propuesta medida, cuidada y seria.
-El Frente Amplio perdió la mayoría en la Cámara de Diputados, pero la oposición no parece saber que hacer con eso, ¿lo ve de esa manera?
-Lo que pasa es que la oposición para algunas cosas es una y para otra no tanto. Vamos a ver como pasa en los hechos a partir de que gradualmente nos acerquemos e los tiempos electorales. Creo que hay una necesidad de desmarcarse de algunos y creo que el Frente Amplio tiene la necesidad, por el bien del interés general, de abordar temas no juntando a la oposición sino buscando puntos de acuerdo.
-Ya que habla de tiempos electorales, ya el senador Jorge Larrañaga anunció su intención de competir por la candidatura presidencial de su partido, ¿cómo se vive esta situación en la interna del Frente Amplio?
-Más en corrillos y en rumores que en realidades. Creo que el Frente Amplio lo primero que tiene que hacer es dar una discusión ordenada. Segundo, preparar a su fuerza política para llevar adelante el salto cualitativo que se necesita para un cuarto gobierno. Y después tener el seguimiento y el trabajo concentrado en el gobierno. Luego hay que definir las posibles fórmulas electorales y hacia donde se va. Pero no apresurarse porque el apurarse puede llevarlo a desconcentrarse y no tener una discusión ordenada, el primer partido político del Uruguay, lo puede llevar al fracaso. No podemos caer en la tentación del electoralismo que tiene la oposición, porque si eso es así banalizamos la política y damos a entender que la política es esencialmente la disputa electoral y alejamos al ciudadano del interés por la cosa pública. Sobre eso debe tener cuidado la izquierda uruguaya.
-Desde Asamblea Uruguay, ¿ya ven a Danilo Astori como candidato?
-Nosotros, la verdad, no lo hemos analizado nunca. Es curioso como el nombre de Danilo aparece en boca de otros y no en la propia. Y creo que en política es claro que los tiempos hay que administrarlos adecuadamente y estoy convencido que figuras como la de Danilo, la de (José) Mujica y la de Tabaré, sin ser candidato, son esenciales para consolidar un cuarto triunfo de la izquierda. Eso no significa definir su rol de candidatos a algo sino que tienen un rol definitorio en el triunfo futuro del Frente Amplio.
-Asamblea Uruguay fue noticia últimamente por algunos hechos como la falta de pago de aportes de la secretaria de un diputado o el alejamiento de algunos militantes, ¿eso puede afectarla electoralmente?
-Obviamente fueron situaciones no deseadas. En particular siempre duelen las alejamientos. Lo viví en el caso de Gerardo (Rey) que es un gran compañero. Creo que en realidad tenemos que concentrarnos en fortalecer este espacio político por la responsabilidad que teneos con el Frente y con el Frente Líber Seregni en su conjunto. Me parece que hay cantidad de frenteamplistas independientes que van a buscar en nosotros, en el Frente Líber Seregni y en Asamblea Uruguay un espacio netamente de izquierda pero de una izquierda que quiere gobernar y no ser testimonial. Para eso tenemos que superar cuestiones que son trascendentes como son mejorar la organización, nuestro relacionamiento interno y darle una vida más dinámica. Es una responsabilidad que tenemos con el Frente en su conjunto y siento que tenemos un desafío enorme.
-¿Hay problemas de relacionamiento entonces?
-Hay problemas de funcionamiento y creo que nosotros hasta ahora básicamente nos hemos limitado a una coordinación de actividades. Si bien hemos ido a actividades conjuntas en el interior y tuvimos una agrupación de gobierno a fin de año, queda mucho por hacer, queda mucho por andar. No tenemos problemas de línea política. La línea política de los integrantes del FLS se ve donde ellos están. Tenemos problemas a la hora de mejorar el funcionamiento, que no es algo menor.
-Un ejemplo de ciertas diferencias, o más de distintos puntos de vista, se ve cuando se habla de la derogación del delito de abuso de funciones, ¿que puede suceder cuando el tema ingrese en Diputados?
-Que puede suceder yo no lo se, pero puedo decir que debemos tener un abordaje más riguroso. Yo personalmente estoy a favor de la regulación. Porque creo que es el camino políticamente posible, porque nos lleva por el camino que la bancada de diputados del Frente Amplio intentó en 2014. En ello tengo que valorar mucho el trabajo del ex diputado de la Vertiente Artiguista Daoiz Uriarte. Entiendo que la redacción más adecuada es que “el funcionario público que abusando de su cargo realice u omita un acto en violación de la ley con el fin de obtener un beneficio económico indebido para si mismo o un tercero en perjuicio de la administración será castigado con tres meses de prisión a tres años de penitenciaría”. ¿Cuál es la diferencia? Que en este esta caso estamos hablando del aspecto económico, esto es si uno como administrador por acción u omisión se benefició a si mismo a un tercero debe tener una eventual sanción, pero no como está hoy redactada que es muy arbitrario, es muy vago y lo deja libre a los operadores judiciales y entra todo en eso. En eso todos tenemos que hacer una autocrítica y creo que tenemos que asumir que en el caso de Uruguay ya se han tomado como base disposiciones de la Comisión Interamericana contra la Corrupción que son las leyes 17.008 y 17.056, por lo cual si pasamos derecho a la derogación podemos quedar omisos ante compromisos que asumimos hace poco tiempo. Por eso estoy a favor de la regulación y no de la derogación.
-¿Hay posibilidad de aprobarlo de esta manera?
-Tenemos que ir ahora a la discusión interna en el Frente y a la conversación con los demás partidos. Creo que en esto tenemos que tratar de aventar la demagogia y el pasaje de factura barata. Me molesta fundamentalmente como se ha tratado de ensuciar a dos compañeros honestos que lo único que han hecho es trabajar por el bien del país como han sido Fernando Calloia y Fernando Lorenzo. Acá tenemos que trabajar en forma seria, pensando en el futuro y dar una norma que de garantas a la gente de que no hay una especie de cheque en blanco a la impunidad y garantía a los administradores de que van a ser juzgados efectivamente con garantías reales y no con esta vaguedad que hoy existe.
-En los últimos días el vicepresidente Raúl Sendic volvió a estar en el centro de la información, ¿cómo se ve desde Asamblea Uruguay su situación?
-Dos cuestiones: la primera, como sector nunca lo analizamos. No tomamos posición ni fue materia de análisis. Segundo, me parece que por un lado hay una especie de persecuta hacia Raúl y es exagerado. En este sentido me parece que lo importante es que si alguien tiene un denuncia fuerte y fundamentada que vaya a la Justicia y la lleva adelante. En principio me parece que lo más importante es tener mucha calma, mucha serenidad y si hay algo que objetivamente esta mal se señala. Me preocupa mucho el abordaje público de estos temas. Si acá se actúo ajustado a derecho está todo bien y en ese sentido no ha sido un tema que haya sido tratado por nosotros, la diferencia mayor estuvo sobre cuestiones vinculadas a la administración de Ancap y en este sentido me parece que tenemos que abordar esto con ecuanimidad y no prejuzgar, que es lo que está pasando.