La inauguración se realizó el martes 9 en el paraje Burucayupí. “La electrificación rural conjuga la voluntad de los vecinos y su capacidad de organización y trabajo, junto a la labor de organismos del Estado”, destacó Sosa. El jerarca subrayó que se viene tendiendo un promedio de 1.000 kilómetros anuales de red en el medio rural. Esto ha posibilitado que Uruguay tenga el 99,7% de su población con acceso a la energía eléctrica. En un mundo que, en muchos lugares, “no considera a este recurso como un derecho sino una mercancía”.
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Al respecto recordó que mil millones de personas, en todo el planeta, no acceden a la electricidad. También destacó que nuestro país fue el primero en Iberoamérica en tener todas sus escuelas electrificadas.
La obra es una más de las ejecutadas en el marco del Programa Interinstitucional de Electrificación Rural. Involucra a la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP), al Ministerio de Industria, Energía y Minería (MIEM), al Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP), al Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente (Mvotma), al Ministerio de Desarrollo Social (Mides), al Instituto Nacional de Colonización (INC), la Administración Nacional de Telecomunicaciones (Antel), al Movimiento de Erradicación de la Vivienda Insalubre Rural (Mevir) y a UTE. Tiene por objetivo posibilitar el acceso a la energía eléctrica a familias residentes en parajes alejados de los centros urbanos. Como ha sucedido en general en cada una de las intervenciones realizadas por el Programa, el costo es asumido por los vecinos, OPP y UTE.
En este caso, los trabajos incluyeron el tendido de 12 kilómetros de red de media tensión monofásica. También la construcción de cinco subestaciones para otros tantos colonos. El costo ascendió a $ 3.625.437, cifra aportada en un 60% por los vecinos -en este caso a través del Instituto de Colonización (INC)-. Y el restante 40% es subsidiado por OPP. UTE, por su parte, asume a su costo el valor de los materiales eléctricos que es de $ 1.550.000.
UTE se sumó a fondo de investigación nacional
La Administración de Usinas y Transmisiones Eléctricas (UTE) se incorporó al Fondo Sectorial de Investigación a Partir de Datos (FSID), creado por la Agencia Nacional de Investigación e Innovación (ANII) y el Ministerio de Industria, Energía y Minería (MIEM) para financiar proyectos orientados a la generación de conocimiento a partir de la explotación de datos nacionales disponibles.
Estos proyectos pueden ser de interés para distintas ramas del conocimiento, como las ciencias biológicas, la robótica, la informática aplicada a la medicina, la economía y el derecho, entre otros.
El Fondo fue creado en el año 2017. La participación de UTE se da a partir de la segunda convocatoria, para este año 2018, pero incluye también un aporte destinado a financiar proyectos presentados en 2017 y aprobados, pero cuya ejecución se da durante este año. El aporte del ente es de 200.000 dólares para las convocatorias 2018 y 2019 (US$ 100.000 por cada una) y unos US$ 70.000 destinados a los proyectos correspondientes a la convocatoria 2017.
Estos últimos incluyen varias iniciativas de interés para UTE, como “Análisis y optimización de producción de parques eólicos de UTE en base a datos históricos”, “Nuevo mapa de vientos extremos a nivel nacional” o “Modelo de previsión de la demanda de energía eléctrica para la optimización del despacho energético”, entre otras. En 2017 se presentaron 58 proyectos, de los cuales fueron seleccionados 27 para su evaluación por el Comité Técnico del Fondo.
El FSID propone valorar especialmente aquellas propuestas que involucren más de un sector o alianzas entre diferentes actores, con el objetivo de fomentar la colaboración entre instituciones, estableciendo además que los productos finales de los proyectos deben ser públicos así como los datos que se utilicen para alcanzarlos.
La incorporación de UTE a este Fondo es por un plazo de dos años, con renovación automática, y abarca las convocatorias 2018 y 2019, con ejecución estimada para los proyectos seleccionados durante 2019 y 2020.
Bonificación a pacientes electrodependientes
UTE aprobó una exoneración del 100% del Cargo Fijo y del Cargo por Potencia Contratada y del 75% del costo del primer escalón de consumo de energía para los domicilios de pacientes electrodependientes que estén en situación de vulnerabilidad económica. El beneficio se aplica a clientes con Tarifa Residencial Simple (TRS) y una potencia contratada de hasta 3,7 kW.
El descuento puede llegar a $ 900 en el caso de clientes con esa potencia contratada y un consumo superior a 100 kWh mensuales.
La disposición incrementa el beneficio que ya existía para todos los electrodependientes que vivan en hogares considerados de bajos recursos, incluyéndose en el criterio a quienes utilizan para su desplazamiento sillas de ruedas eléctricas. El objetivo es contemplar en parte el aumento en el consumo de energía eléctrica derivado del uso de estos artefactos.
Para acceder a este beneficio es necesario una certificación médica que acredite la necesidad extrema del uso del equipamiento eléctrico, así como una certificación de un trabajador social de la institución médica o del Mides acerca de la situación de bajos recursos del hogar involucrado.
El descuento se aplica por doce meses, transcurridos los cuales se deberá volver a presentar los certificados mencionados.
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