La policía de Sri Lanka estimó en 290 muertos y más de 450 heridos el balance preliminar de la cadena de ataques con explosivos que tuvieron lugar en este Domingo de Pascua (Resurrección), principalmente en Colombo y sus inmediaciones.
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Previamente, las autoridades srilanquesas confirmaron al menos 160 muertos, entre ellos hasta 30 extranjeros, así como la detención de 7 sospechosos en relación con los atentados.
El medio local News 1st, por su parte, informó de al menos 190 muertos y 499 heridos.
Seis detonaciones ocurrieron por la mañana en tres iglesias y tres hoteles de Sri Lanka, causando al menos 185 muertos y 499 heridos, según News 1st.
Posteriormente hubo otra explosión cerca del Zoológico Nacional que provocó heridas fatales a dos personas más, y al poco tiempo, una octava detonación en otro localidad, Dematagoda, que supuestamente mató a tres policías.
Ningún grupo ha reivindicado hasta ahora los ataques en el país insular, que vio una reducción radical del número de incidentes terroristas tras el fin de la guerra civil en 2009.
En Sri Lanka fue declarado un toque de queda por doce horas.
Todas las escuelas permanecerán cerradas el lunes y el martes por directiva del Ministerio de Educación.
En el aeropuerto internacional Bandaranaike de Colombo se extremaron los controles de seguridad, por lo que a los pasajeros se les recomienda presentarse en la terminal cuatro horas antes de la salida de su vuelo.