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La población del departamento crece y eso es un desafío

Orsi: Canelones vive un presente “auspicioso”

El intendente de Canelones, Yamandú Orsi, no dudó en calificar de “auspicioso” el presente de ese departamento, aunque advirtió que también “es desafiante, ya que sigue creciendo en cantidad de población”.

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Caras y Caretas Diario

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En entrevista con Caras y Caretas, Orsi repasó las diversas obras que se vienen desarrollando en el departamento en materia de caminería, saneamiento, alumbrado y recolección de residuos, así como las acciones que se llevan adelante para promover la llegada de inversores a su territorio. El jefe comunal canario también remarcó que nunca dispuso una amnistía tributaria, “porque esa política genera un acostumbramiento nocivo en la gente, que esperaba el año electoral para pagar los tributos”.   ¿Cómo diría que es el presente del departamento de Canelones? Creo que sin ningún lugar a dudas es auspicioso, ya que hay un volumen de inversión y de infraestructura muy bueno. Estamos bien en materia de cumplimiento de las previsiones en vialidad, alumbrado, recolección de residuos y hay más de 100 millones de dólares para ejecutar en obras. Pero así como vamos bien, debo decir que la situación es desafiante porque el departamento sigue creciendo en cantidad de población.   ¿Ese crecimiento no se detuvo? No, al menos en lo que visualizamos desde la intendencia. Por eso, entre otras cosas, creemos imprescindible un ordenamiento del territorio rural, que nos va a dar reglas de juego claras y que no tiene antecedentes en el país y muy pocos en el exterior. Por eso digo que tenemos un muy buen presente, pero también muchos desafíos para el futuro.   ¿También se ha producido un incremento de las empresas que se instalan en el territorio canario? Sí, los corredores que hemos definido como corredores industriales han tenido un crecimiento importante, fundamentalmente la ruta 101, aun más que la ruta 5. Eso tiene que ver con la economía nacional, con la Ley de Inversiones, pero también con un ordenamiento del territorio que hace que los inversores sepan bien a qué se someten en cada zona del departamento. Algunas veces hemos tenido que decir que no. Hay unos cuantos polos logísticos, algunos de los cuales me han sorprendido por su desarrollo, y que van de la mano con el crecimiento de la logística que se ha producido en el país. Ahora hay una nueva ley en curso de parques industriales con la que se busca estimular más la implantación de emprendimientos en esas áreas. Pienso que hasta ahora, a veces, cuando los empresarios sacan cuentas de los beneficios que les reporta estar en un parque industrial, tal vez no sean lo suficientemente buenos como para hacerlos desistir de realizar un emprendimiento en un emplazamiento propio. Hay que seguir apostando a mejorar las condiciones para los empresarios. También hay un importante crecimiento de la inversión inmobiliaria.   ¿Recibe muchos pedidos de empresarios para ser recibidos por usted? No tanto conmigo, ya que en Canelones tenemos una Agencia de Promoción e Inversión que es la que se encarga de eso. A veces vienen directamente, y otras, después de pasar por la agencia, vienen acá para tratar de reunirse. Pero no necesariamente tienen que pasar por el despacho del intendente para que las cosas caminen.   Usted mencionó la inversión en el área inmobiliaria. ¿En qué zona del departamento? Fundamentalmente en la costa, allí es donde se ha dado el mayor crecimiento. Pero también se ha notado un crecimiento en materia de viviendas para habitación en la zona de Pando, del estilo de las cooperativas de trabajadores.   Ciudad de la Costa tenía un importante problema en materia de saneamiento. ¿Se ha solucionado el problema? El saneamiento -que lo hace OSE- viene más rápido que la pavimentación y drenaje de las calles, que es lo que hacemos nosotros. La obra es visible; hoy estamos trabajando en Lagomar y Solymar Norte, y vamos a seguir hasta el Pinar. En una siguiente etapa, que tal vez no sea en este período, llegaremos hasta San José de Carrasco, a la altura del parque Roosevelt. La idea es un colector que va a resolver los problemas que tienen las inversiones hoteleras y de edificios que hay en las cercanías del Aeropuerto de Carrasco. Ahí se instalará un colector que baja hacia la rambla y que incorporará a todos los emprendimientos que están sobre la costa, en la zona conocida como Racine. Eso descargará en un colector que está a lo largo de la rambla, luego se envía por bombeo hacia las piletas que están al norte de la Interbalnearia, y desde ahí, por gravedad, baja un agua tratada que se lanzará al Río de la Plata por medio de un emisor de unos 800 metros.   Aunque la obra no está terminada, ¿se ha notado una mejora en la situación en materia vial? Sí, sin dudas, ahora se nota. Si se pasa por Ciudad de la Costa, la mejora es evidente y no sólo a la altura de la rambla, sino en la parte norte de los balnearios. Incluso en algunos lugares hemos cambiado los formatos de trabajo y hemos priorizado la construcción de cunetas para el drenaje de las calles. Porque el problema es que cuando llueve, es un caos. Empezamos a trabajar primero en esto y después vamos con el pavimento.   ¿En materia de caminería rural se ha logrado pasar bien el verano? Sí, venimos trabajando bien y la idea es ir cambiando algunas conectoras de balasto a pavimento firme como Cuatro Piedras, Tapia Pedrera, Los Aromos, Piedritas, que va desde Pando a Suárez. Esto se está haciendo con algunos aportes del gobierno nacional y nosotros nos encargamos de mantener el resto de la caminería rural con obra de administración. Vale la pena; ojalá pudiéramos hacer todos en asfalto, pero es imposible. Estos pavimentos tienen mayor durabilidad y permiten una mejor conexión entre las distintas zonas de Canelones. Esto permite una mayor movilidad de la gente que reside en las distintas partes del departamento.   ¿Cómo ha sido la experiencia de Canelones con la distribución de contenedores en los domicilios de los habitantes de distintas ciudades? Ha sido muy buena, es una modalidad que existe en otras partes del mundo. Hicimos una experiencia piloto hace unos años en Las Piedras y ahora la estamos tratando de generalizar en los barrios, mientras que en los centros de las ciudades seguimos con el sistema de recolección tradicional. Arrancamos con 20.000 contenedores, hoy tenemos 75.000 distribuidos y vamos a terminar con 140.000. De estos, 15.000 familias van a tener dos contenedores en sus casas de manera que puedan realizar una clasificación de los residuos. Lo que tenemos que solucionar ahora es la cuestión de la disposición final, que es nuestro gran debe. Hicimos un llamado a licitación que estamos a punto de adjudicar. Se presentaron tres empresas con muy buenas propuestas y estamos analizando cuál es la mejor para los intereses de la comuna.   ¿Están pensando en generar energía a partir de la basura? A lo que apuntamos es a hacer un relleno sanitario de última generación con clasificación de materiales y, en caso de ser posible, generación de energía para la propia planta. No pensamos en un proyecto más ambicioso, ya que en estos momentos no es atractivo económicamente un emprendimiento como ese en función de los valores que se pagan a quien la genera. El objetivo principal es terminar con el vertedero de Cañada Grande, que es lo que tenemos hoy.   La iluminación es otro tema que es difícil de atender por el volumen que representa. ¿Cómo está esa área de su administración? Venimos bien, estamos cambiando entre 4.000 y 5.000 focos por año. Es el ritmo que tenemos y que nos lleva a pensar que al final de este período la superficie urbana del departamento va a tener cien por ciento del alumbrado puesto con un aditivo importante que es la incorporación de luminarias led, acción que se paga con el ahorro de energía que se logra. Lo están tratando de hacer todas las intendencias del país.   ¿Cómo le ha ido a Canelones con el Sucive? Muy bien, a todo el país le ha ido bien. Todos hemos crecido de manera pareja y tiene que ver con el mayor volumen de compras y con el hecho de que hoy la gente paga donde transita. Las ventajas tramposas que había antes hoy ya no están. Es justo y racional que se tribute donde uno vive, y eso es lo que está pasando. Y ahora vamos por la libreta única de conducir, de manera que a todos los conductores del país se les exijan las mismas condiciones. Había criterios muy dispares, incluso dentro de un mismo departamento. Será un avance similar al Sucive. Otro buen paso será la unificación de las multas y a la incorporación de la libreta por puntos, de manera que las infracciones del conductor incidan en su calificación.   ¿Y en morosidad, cómo está el departamento? En contribución inmobiliaria en el orden de 30%, en patente bastante menos, 15% aproximadamente, pero ha habido avances, sobre todo en el pago de la contribución, ya que arrancamos con 60% hace diez años.   ¿Y cómo se hace para que la gente tome conciencia de que hay que pagar? Creo que es un tema de ida y vuelta y tiene que ver con el sentido de responsabilidad de una y otra parte, esto es, el contribuyente tiene que abonar los tributos y la intendencia darle los servicios correspondientes. Se retroalimentan uno y otro. También tiene que ver con el sentido de la justicia y por eso nunca dispusimos una amnistía tributaria porque esa política generaba un acostumbramiento nocivo en la gente, que esperaba el año electoral para pagar los tributos. Eso no existió más y ha sido una buena decisión.   ¿Cómo hace el intendente de Canelones para estar presente en todas las poblaciones que tiene el departamento? No se puede, para eso están los 30 municipios y sus alcaldes. Ese ha sido un gol de media cancha del primer gobierno del Frente Amplio. Ese tercer nivel de gobierno es una necesidad de gestión. Se necesita gente constituida en el territorio respaldada por la legitimidad que da el voto y esos son los alcaldes.   ¿Tiene contacto con los alcaldes? Sí, en forma permanente, pero también tenemos un equipo que articula con ellos, así como cada una de las direcciones tiene que vincularse sí o sí con los municipios. Hay comités de gestión que analizan los presupuestos y articulan entre ellos.   ¿Cómo es la relación con los alcaldes de la oposición? Muy franca y muy sincera, pero desde la colaboración y no desde la competencia. Me consta que esa no es la realidad nacional.   ¿Cómo ve su futuro político? Mi idea es completar diez años de gestión, pretendo que la fuerza política redoble la apuesta y nos siga confiando la gestión del departamento de Canelones. Es cierto que en lo relacionado a la definición a nivel nacional, los nombres de algunos de nosotros -el de Daniel Martínez y el mío- han comenzado a aparecer como alternativas. Veremos cómo se procesa todo, pero el objetivo es seguir en Canelones y planificar a mediano y largo plazo.  

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