Este martes 23 de febrero vencía el plazo con que contaba la administración de Barack Obama para presentar al Congreso su propuesta para el cierre definitivo de la cárcel estadounidense en la base naval de Guantánamo. Ya anoche el portavoz del Pentágono, Jeff Davis, anunció que cumplirían con la fecha límite y hoy estaría el plan. “El plan es presentar al Congreso lo que pensamos y lo que consideramos es el camino necesario a seguir para lograr el cierre de Guantánamo”, dijo. La Casa Blanca pretende enviar a terceros países a los detenidos que autorice el Departamento de Defensa para su liberación. El resto se trasladaría a penitenciarías dentro de Estados Unidos, algo a lo que el Congreso se ha opuesto desde un principio y los analistas creen que no tendrá modificación. El Pentágono ya ha barajado algunas instalaciones estadounidenses para acoger a los presos, entre ellas Fort Leavenworth, en Kansas, o la prisión federal de Colorado. En esta última está recluido el egipcio Ramzi Yusef, autor del ataque contra el World Trade Center en 1993, y el asesino en serie Ted Kaczynski, conocido como Unabomber. Sin embargo, el gobierno de Obama, quien prometió al inicio de su presidencia cerrar la prisión, no piensa que el Congreso apruebe el plan. Dicho pesimismo, según un portavoz de la Casa Blanca, se basa “en la manera en que muchos miembros del Congreso han tratado este asunto en los últimos siete años». Actualmente Guantánamo alberga a 91 reclusos, aunque llegó a tener hasta 779 detenidos. El personal encargado de su vigilancia asciende a más de dos mil personas, entre militares y personal civil. El gasto de mantención de la cárcel llega hasta a 4,4 millones de dólares al año por cada preso, lo que la hacen la penitenciaria más cara del planeta.
Hacete socio para acceder a este contenido
Para continuar, hacete socio de Caras y Caretas. Si ya formas parte de la comunidad, inicia sesión.
ASOCIARME