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Política

Con Juan Castillo

Los cuatro ejes programáticos que los comunistas impulsarán en el Frente Amplio

El secretario General del PCU, que fuera legislador, tuvo responsabilidades de gobierno, vicepresidente del Frente Amplio y dirigente sindical habló sobre el rol de los comunistas uruguayos y los perspectivas del movimiento comunista internacional, en ésta etapa donde vuelven a florecer contra ellos los "cazadores de brujas", y también de sus propuestas para las definiciones programáticas del Frente Amplio.

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¿Cómo se define un comunista uruguayo del siglo XXI?

Un Comunista uruguayo, está definido por su propia historia, sus propios principios que difícilmente cambien; es una definición de militante comunista, aquel que toma las banderas de la clase obrera, el que se compromete con sus reivindicaciones, con su suerte, al que es sangre de su seno ,al que emerge a partir de la organización obrera de los trabajadores, tal vez ya no tengamos aquella masa que conocimos como el proletariado pero sí los trabajadores y las trabajadoras, comprometido con sus demandas, en transformarse en su elemento de organización política , en su instrumento de organización política para cambiar la sociedad, que nosotros estamos para dar a conocer la revolución, la construcción de una patria socialista y del comunismo. Esas tres o cuatro cosas básicas no cambiantes , que puede cambiar la forma de decirlo, te pueden cambiar los énfasis, pero sigue tan igual que hace en nuestro caso, 103 años atrás desde la fundación del Partido Comunista, un comunista uruguayo que siente orgullo de su historia, aunque ella ha tenido altibajos, lo hemos dicho, hemos ido asumiendo públicamente en nuestras actividades de aniversario, en los actos en homenaje a los mártires de la 20, en las aperturas de los congresos.

Nos hacemos cargo de toda la historia, porque como normalmente en gran parte de la concepción de otro sector político, de sectores políticos, adversarios o enemigos políticos del nuestro nos pasan factura, nosotros asumimos crítica y autocríticamente los aciertos y los errores que tuvimos y también hemos tenido etapas de errores, de errores colectivos y errores individuales. No tenemos otra forma de poder crecer políticamente, sino es a partir de ese reconocimiento .

¿Sigue vigente el Partido Comunista y el comunismo?

Parado en este escenario del Uruguay de hoy , del mundo de hoy, se justifica cada día más su rol y su papel del porqué de su existencia a partir de que el capitalismo no ha sido capaz de resolver los grandes problemas y las grandes contradicciones de la sociedad, la que emerge en su propio seno. Esa contradicción en torno a querer en cualquier circunstancia acrecentar sus ganancias, explotar más a los seres humanos.

En un planeta con 8.000 millones de habitantes, en el cual una porción importante padece hambre, mueren niños cada minuto por falta de comida, por falta de agua potable. En el mismo mundo que los mil millonarios han visto en plena pandemia crecer sus grandes ganancias. En Uruguay has llegado a tener la contradicción que mientras se tomaban medidas para recortar y limitar el trabajo y la economía, hay sectores que crecieron y mucho, Uruguay también es más desigual. El capitalismo genera desigualdad, más que nunca en la historia y además, en su afán de lucro pone en peligro la vida y al planeta mismo. El capitalismo está en crisis no ofrece un futuro a la humanidad, por eso, si, está más vigente que nunca construir una alternativa al capitalismo, para nosotros eso es el socialismo y el comunismo.

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Desde la caída del campo socialista ¿Cómo se ve el Partido Comunista en el concierto internacional del movimiento socialista?

El golpe de la caída socialismo fue muy grande, no solamente para los comunistas uruguayos, fue muy grande para el movimiento comunista internacional, para los procesos revolucionarios, para los partidos políticos de izquierda, para los sectores marxistas. E inconscientemente para el resto de la sociedad también fue un golpe grande, se terminó un fiel de la balanza en el cual había un contrapeso con todos los errores que se han cometido, con todas las carencias que tenía un proceso todavía incipiente en el resto del mundo.

En donde la pérdida, la caída abrupta de los procesos revolucionarios, generó muy fuerte impacto de todo punto de vista de las estructuras orgánicas, de posicionamiento político, desde la voluntad personal de muchos militantes que abandonaron su compromiso, que se desafiliaron del partido, que no quisieron saber más nada con la izquierda. A otros que asumían su cuota parte de responsabilidad por haber hecho seguidismo político, seguidismo ideológico, como le decían miembros de la dirección de nuestro Partido Comunista.

Yo he sentido mucho en los debates y las discusiones que habría que buscar formas en el capitalismo, de que el capitalismo está en crisis, repetimos nosotros desde que me afilié al partido, pero no termina de romper ni de perecer el capitalismo. Hay que generar las condiciones para ello, por lo tanto, siempre hay un móvil, siempre hay un motivo de por qué organizarnos, de por qué estudiar, de por qué tener cabeza propia de por qué cada día más comprometerse en el escenario nacional y en la solidaridad internacional con los procesos políticos de cambio.

¿Hablando de estudiar qué intelectuales del pensamiento comunista consultan hoy más allá de los clásicos?

Pero los clásicos siguen siendo nuestro libro de cabecera, no solamente por su tamaño y por su volumen que serían una gran almohada, sino además por sus contenidos.

El golpe de la caída socialismo fue muy grande, no solamente para los comunistas uruguayos, fue muy grande para el movimiento comunista internacional, para los procesos revolucionarios, para los partidos políticos de izquierda, para los sectores marxistas. E inconscientemente para el resto de la sociedad. El golpe de la caída socialismo fue muy grande, no solamente para los comunistas uruguayos, fue muy grande para el movimiento comunista internacional, para los procesos revolucionarios, para los partidos políticos de izquierda, para los sectores marxistas. E inconscientemente para el resto de la sociedad.

El Pepe D´elía constantemente le preocupaba, ya viejito defendía y nos decía, me acuerdo que lo íbamos a ver con Fernando Pereira, cuando ya no se movía de la casa, y vos no podías ir a ver al Pepe sin tener las últimas informaciones y los datos de la economía, de la producción, del producto bruto a nivel nacional y del mundial, y él siempre terminaba diciendo: ¿qué están haciendo por los jóvenes para incentivar que analicen, para que piensen con cabeza propia? Bueno, siguen siendo entonces Marx, Lenin, Engels, sigue siendo de Gramsci, grandes pensadores, Rosa Luxemburgo. siguen siendo aquellos que otrora nos ponían en el lugar del otro, que nos confrontaba a veces sus elaboraciones y su propuesta. Obvio que para el Partido Comunista, todo el legado de Rodney Arismendi es un legado importante, importantísimo, de permanente actualidad., el de Massera, la elaboración y construcción colectiva del Partido. El de todas y todos los que construyeron una ruta para la revolución en Uruguay que tiene en la unidad social y política del pueblo su corazón y en la democracia avanzada el camino.

¿Consideras que hay anticomunismo en la política uruguaya?

Hay dosis, reflejos muy minoritarios; yo no creo que todo el que no comulgue con las ideas del Partido Comunista sea por eso un anticomunista, simplemente no es identificarse con un partido político de izquierda y con un partido político que se propone generar las condiciones para un proceso revolucionario del que no reniega.

La expresión más reaccionaria de la derecha sí expresa muchas dosis de anticomunismo , muchas veces son los que pintan los muros en contra de la militancia y de la actividad de los comunistas, pero

creo que al mismo tiempo pesa mucho la historia de nuestro propio partido en nuestra sociedad y es más fuerte que ellos. La condición de comunistas en otro momento político de la vida del país era objeto de persecución y eso nos da una impronta importante. Hay algunos sectores reaccionarios, algunos de ellos que son de corte fascista y no necesariamente sólo en Cabildo Abierto, sino también en alguno de los partidos tradicionales, pero por suerte para la sociedad uruguaya, para las libertades y la democracia uruguaya, no son la mayoría.

¿ Hay autonomía de los militantes comunistas en el movimiento sindical?

Hay una orientación del Partido, marca ejes políticos, prioridades políticas; como los llevamos a la práctica en cada uno de nosotros depende del sindicato o la organización social en donde militemos, porque también hay cooperativistas, compañeras en movimientos feministas, en el movimiento estudiantil. En cómo transforma para recrear la línea política del partido en acción social, el arte es tuyo y es la capacidad que tengas y decisión democrática de las organizaciones sociales.

¿No nos cuesta mucho creer que los comunistas uruguayos impulsamos un modelo de partido único en Uruguay? No, no está escrito en ningún lugar y yo no creo que eso sea posible ponerlo en práctica porque tenemos unido a nosotros ésta democracia. ¿No nos cuesta mucho creer que los comunistas uruguayos impulsamos un modelo de partido único en Uruguay? No, no está escrito en ningún lugar y yo no creo que eso sea posible ponerlo en práctica porque tenemos unido a nosotros ésta democracia.

Los que toman las decisiones son los sindicatos, son los trabajadores, no el Partido. Nosotros creemos que la línea más justa, que las propuestas e iniciativas más justas son las que impulsan nuestros comunistas, pero no siempre tenemos la razón. La razón se construye colectivamente con todos, con otros compañeros y con otras compañeras que teniendo otra orientación y hasta otra ideología, pueden comulgar con nosotros y caminar juntos . Nos costó aprenderlo en la vida, no siempre era ésta la respuesta de los comunistas y cada día más esto se acentúa y nos pone a prueba como nosotros trabajamos, como nosotros tenemos la capacidad de no colocar todas las cosas como principio y como es un principio, no los negociamos. Hay algunas cosas que son principios elementales, pero al principio básico del es la unidad. Y entonces, a partir de ahí uno trabaja con otra cabeza, que creo está siendo advertida por nuestros compañeros y nuestras compañeras como un esfuerzo que vale la pena realizar.

¿El Estatismo sigue siendo una vía válida para la construcción del socialismo?.

Hubo pruebas de que no. Fue una gran teoría, una práctica recurrente de hace 40 o 50 años atrás que para que fuera un proyecto socialista o para transformar una sociedad con un proyecto revolucionario de socialismo tiene que tener a mano el Estado. Hoy China no es así, y podremos discutir todo lo que tengamos para discutir, todavía no entender algunas cosas, como puede costar comprender sociedades como China. Pero lo cierto es que se convive en otras formas y otras prácticas; a veces el debate es si de verdad es socialismo o en China es un capitalismo de Estado, si es una economía planificada o es dirigida. Hay varios debates, varias discusiones. Yo creo que esto está directamente ligado a las características de cada nación, de cada pueblo, a la idiosincrasia de ese pueblo.

También a las posibilidades reales que se deben llevar adelante. ¿Cómo hacemos, que pensamos nosotros en el Uruguay? Somos amigos y somos aliados de varios procesos políticos revolucionarios del mundo y los saludamos para ellos mismos, pero acá sería impensable que pudiéramos poner en práctica el mismo método, la misma forma. ¿No nos cuesta mucho creer que los comunistas uruguayos impulsamos un modelo de partido único en Uruguay? No, no está escrito en ningún lugar y yo no creo que eso sea

posible ponerlo en práctica porque tenemos unido a nosotros ésta democracia. De hecho, conformamos nuestro espacio político con 32 sectores dentro del Frente Amplio. Es inviable un proceso político de profundidad, de avanzar en democracia, de profundizar la misma sin reconocer los aportes de Artigas, de Varela, de Batlle, entonces esa característica capaz que no lo entiendan otros comunistas y otros revolucionarios del mundo, pero nosotros no tenemos que hacer buena letra con los demás, tenemos que comprender a nuestra sociedad.

Conocer nuestra sociedad y transformarla es nuestra pelea. Hoy es una mejor distribución de la riqueza, es avanzar en derechos, es buscar la justicia social. Eso ya sería todo un gran proceso revolucionario en el Uruguay, quedando todavía mucho camino para hablar de la construcción de socialismo como tal.

La derecha los critica por el apoyo a procesos como el de Cuba, Venezuela o Nicaragua.

Permanentemente estos temas están en la mesa de debate; ocurre que desde la clase dominante en los medios de comunicación, provocan la reacción política, intentan hacernos olvidar de la mala distribución de la riqueza, del hambre y la miseria instalada en Uruguay para colocar lo que pasa en Nicaragua en este momento, que pasa en Venezuela que no permite las libertades públicas, que en Cuba no hay democracia. Nosotros somos solidarios con los procesos de cambio de cada pueblo y respetuosos de esos procesos tal cual se dan en cada uno de esos pueblos.

No conocemos tan profundamente la característica de la idiosincrasia y las propias medidas que están teniendo que tomar. Somos conscientes a la vez el rol que le cabe el imperialismo que intenta vernos a todos los pueblos de América y del mundo como su patio trasero y que por lo tanto le molesta cualquier cambio en materia de derechos, en materia de democracia, en materia de libertades. Intenta socavar los más de 60 años que está bloqueando Cuba; ¿Cuba es un peligro para esa potencia militar que son los Estados Unidos?, no, el peligro es el ejemplo de los cubanos, capaces de enarbolar las banderas de las libertades y de la autodeterminación. Nosotros velamos por principio que no es solamente para el discurso del respeto a los pueblos, de la voluntad de los pueblos, del principio de autodeterminación.

¿En la tensión que se viene registrando en América latina en estos últimos tiempos entre Estados Unidos y China, cómo se posiciona el Partido Comunista?

Obviamente, primero con mucha preocupación. Nosotros al imperialismo no le creemos, pero ni un tantito, así como lo marcaba el Che; el imperialismo que sufrimos, que intenta oprimirnos acá, en tanto que se cree el gendarme del mundo y el que nos quiere dar lección constantemente en América es el del EEUU. Hoy China está jugando un rol distinto, un rol en donde tiene desde el punto de vista de la política internacional, una concepción. totalmente distinta a los Estados Unidos y desde el punto de vista belicista, también, acaba de proponer un plan de paz para Ucrania, mientras EEUU lo único que hace es fogonear la guerra.

¿Cuáles serían los elementos programáticos que impulsaran ustedes en el Frente Amplio ?

Nosotros hemos priorizado que todo el año 2023 sea un año de construcción programática, porque tiene además dos convocatorias, por encima de la voluntad que tenga el Partido Comunista y es que las organizaciones sociales, todas, con un gran rol del movimiento sindical y del movimiento cooperativo y las distintas organizaciones sociales, están convocando y promoviendo el Congreso del Pueblo, que ajuste el programa desde las organizaciones populares, que levante un programa reivindicativo, no para que nosotros hablemos de los sectores sociales, sino que sean los sectores sociales que nos demanden, que es lo que están reclamando, porque al finalizar el año vamos a estar haciendo un Congreso del Frente Amplio que tiene que discutir, elaborar y proponer su programa como oferta para el electorado uruguayo. Ese programa tiene que quedar claramente establecido, por ejemplo, el cambio de la matriz productiva. Nosotros no vamos a seguir y a contentarnos simplemente con ser exportadores de materia prima del Uruguay; vamos a dar algún valor agregado y con eso generar puestos de trabajo genuino.

Esos serían por lo menos 4 ejes : la inversión, el papel del Estado, la democracia, los derechos y las libertades y el relacionamiento internacional, cuatro grandes factores para una plataforma programática de cambios y transformaciones profundas en Uruguay.

Que el Estado juegue un rol distinto, que se transforme no en el discurso, sino en la práctica como un motor que dinamice la economía y la producción de uruguaya y no que te entreguen las grandes empresas públicas de a pedacitos, o en competencia desleal con las multinacionales. Que el Estado juegue un rol distinto, que se transforme no en el discurso, sino en la práctica como un motor que dinamice la economía y la producción de uruguaya y no que te entreguen las grandes empresas públicas de a pedacitos, o en competencia desleal con las multinacionales.

Cuando uno habla de avanzar y profundizar la democracia supone recuperar algunos cambios que se han generado y darle más instrumentos democráticos para nuestra población, para promover seres críticos y autocríticos, también en la educación, en la salud, en varios aspectos de la vida. Entonces un Uruguay que debata y discuta en otras condiciones, por ejemplo el relacionamiento internacional, el intercambio sin el tono para pelearnos todos los días con el Mercosur, para hacer el peor de la fila este, sino para junto al Gobierno de Lula en Brasil y otros procesos políticos de nuestro continente, empujar la necesidad de aunar los esfuerzos de los pueblos de América y negociar y competir con otras grandes organizaciones y estructuras del resto del mundo. Esos serían por lo menos 4 ejes : la inversión, el papel del Estado, la democracia, los derechos y las libertades y el relacionamiento internacional, cuatro grandes factores para una plataforma programática de cambios y transformaciones profundas en Uruguay.

¿Esa discusión programática hoy en el Frente está siendo media empañada por discusiones sobre las candidaturas?

Transitoriamente caemos en la tentación de apetitos electorales legítimos. Todos miran que nosotros tenemos el mejor candidato y la mejor candidata para presidente, para intendente, para ministros (en el Frente Amplio) pero estamos hablando de que estamos construyendo un proceso político unitario, que ese proceso político unitario se llama Frente Amplio, que tiene que ser más abarcativo y autocríticamente corregir errores de gobiernos anteriores para el relacionamiento con los sectores sociales. Por lo tanto, uno tiene que trabajar con otra cabeza, colocar en las prioridades, en los ejes, defender en esta etapa con la acción social, con la acción de masas, del proyecto y el embate del proyecto político de la derecha, defendiendo las conquistas que ya habíamos tenido. Esto es la movilización, el fortalecimiento de la lucha estudiantil, de los jubilados y pensionistas, de los trabajadores y cooperativistas ,del feminismo, todas esas expresiones de lucha contra cada proyecto que exprese retroceso como la reforma jubilatoria o la reforma educativa .

Una parte nuestra discutiendo, pensando en la elaboración programática, si autocríticamente recogimos que generamos errores, vamos a tratar de no repetirlos en un próximo gobierno; luego buscar cuál es el mejor perfil del compañero o de la compañera para que encabece este proyecto. Hay dos o tres o cuatro nombres que andan en danza, que todo el mundo habla, que algunos los mencionan, los manejan en la prensa, nosotros tenemos que definir los instrumentos y la herramienta que tengamos. Nosotros vamos a colocar seguramente una propuesta o nos vamos a encolumnar a través de alguna de esas pre candidaturas, obviamente, pero en el marco de la lucha y la discusión programática, eso es primero.

Quien va a decidir la masa frenteamplista y sea quién sea al que la masa frenteamplista elija vamos a hacer la campaña, porque son las reglas de juego para todos los frenteamplistas y para nosotros una regla de oro, importante. Lo básico es insisto, con qué estructura política y con qué fortalezas vamos a defender en la campaña electoral, que no se debe dar por ganada de antemano las elecciones, sino salir a trabajar para ganar con la mayor amplitud posible, derrotando al proyecto político de las clases dominantes y promoviendo una perspectiva transformadora, nosotros nos proponemos recuperar el gobierno nacional para el pueblo con el Frente Amplio, con un mayor peso del pueblo organizado, es todo eso, no solo las candidaturas.

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