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Preguntas a la prensa mamadera

Por Enrique Ortega Salinas.

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Caras y Caretas Diario

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Es increíble cómo la prensa mamadera pretende engañar a la población al hacer el balance del primer año de gobierno de Lacalle II; pero comprensible, si analizamos que solo en ese primer año Presidencia de la República ha gastado 4,171.000 dólares en publicidad con los medios amigos. Más de la mitad se repartió entre tres canales capitalinos. Adivinen cuáles. No tenemos cifras de lo gastado por intendencias blancas, empresas públicas y ministerios. Como sea, el silencio está garantizado y lo que sea negativo pero inocultable durará en los medios hegemónicos lo que duran tres peces de hielo en un whisky on the rock.

El dinero público ha sido dilapidado para beneficiar a los amigos, y si para muestra basta un botón, aquí van tres: 1) el arrendamiento de un hotel de la familia de Verónica Alonso, 2) la sugerencia (tras una licitación en la que ningún oferente cumplía con todas las condiciones) de comprar 55 vehículos a un amigo de la infancia de Luis Lacalle Pou y 3) variadas contrataciones en calidad de asesores a militantes derechistas por su sola condición de tal.

También está el curro de las auditorías, como la del Antel Arena, que se adjudicó al militante nacionalista Marcelo Caiafa.

Lo de la fundación blanca A Ganar, es todo un tema por sí solo. Varias intendencias nacionalistas han realizado licitaciones (con texto similar, como redactado por la misma persona) y en tiempo récord (menos de una semana) para terminar beneficiando de manera por demás sospechosa a esta organización.

Uno de los últimos escándalos saltó en Rocha, donde también la Intendencia le adjudicó un contrato. El punto es que la subdirectora de la Fundación, Verónica Martínez, y el secretario general de la Intendencia de Rocha, Valentín Martínez, son hermanos. Valentín Martínez integra, por si fuera poco, la Comisión Asesora de Adjudicaciones de la intendencia de Rocha. A la vez, Verónica y Valentín Martínez son hermanos de Nicolás Martínez, secretario de Luis Lacalle Pou.

Mientras tanto, varios funcionarios de ASSE denuncian desde diferentes puntos del país abuso de autoridad, conjunción entre el interés público y privado, compras directas sin llamado a licitación y falta de medicamentos.

Julio Álvarez, director del hospital de Trinidad, era hasta el día de asumir el cargo (20 de junio), presidente de la Cooperativa Médica de Flores (Comeflo) y continúa siendo uno de sus propietarios, lo que explica que todo se derive al operador privado sin licitación. Y lo anterior es solo un ejemplo entre muchos.

A los periodistas que alaban a este gobierno les pregunto si les parece bien:

 

  • Que Luis Lacalle Pou prometiera durante la campaña electoral no subir las tarifas de los servicios públicos y luego las aumentara hasta dos veces en menos de un año.

  • Que hubiera prometido no tocar el salario real y luego tomara medidas con las cuales se quitará un 5 % del mismo, tras un 2020 donde ya se perdió 1,5 %.

  • Que el poder de compra de los trabajadores hubiera tenido en 2020 su mayor caída en los últimos 17 años.

  • Que la violencia policial y callejera se  haya disparado.

  • Que la aclaración de homicidios haya descendido 13,5%.

  • Que se criticara al gobierno anterior la compra del avión multipropósito por poco más de un millón de dólares y luego se compraran dos Hércules por 25 millones de dólares y con fecha de vencimiento para diciembre de 2020.

  • Que escatimen dinero para la ayuda social pero en medio de la crisis, aparte de los aviones, se compren helicópteros y un millar de metralletas.

  • Que una y otra vez se alarmara a la población asegurando que con sus auditorías saldrían a la luz terribles crímenes cometidos por la anterior administración y lo más destacable que hallaron fue café vencido y “falta de apego institucional”.

  • Que varios dirigentes de la coalición fueran procesados por delitos comunes en diversos departamentos..

  • Que el Directorio del Partido Nacional denunciara tras las elecciones internas de 2019 al hoy senador Juan Sartori ante la Justicia y el expediente duerma tranquilo y sin intenciones de despertar porque el herrerismo necesita de los votos y el dinero del millonario.

  • Que desde la coalición multiderechista y los medios hegemónicos de comunicación se arremeta a diario para descalificar a los representantes de los trabajadores y miren para otro lado cuando se desbocan los representantes de los empresarios.

  • Que se haya puesto en marcha el plan herrerista de deterioro de las empresas públicas, esas que siempre soñaron con privatizar.

  • Que Lacallle Pou diera a  Gerardo Sotelo el papel de inquisidor sobre los medios públicos de comunicación.

  • Que se elogie el liderazgo del presidente mientras el Partido de la Gente dejó de existir, el Partido Independiente es unipersonal y Cabildo Abierto dispara su metralla verbal contra el Partido Colorado y estos les devuelven las gentilezas en forma pública con calificativos como “basura” y hasta se han registrado agresiones físicas entre los mismos cabilderos y en la puerta del despacho del general.

  • Que despreciáramos la ayuda ofrecida por el presidente argentino para conseguir las vacunas; acto de soberbia que provocó que las adquiriéramos a un precio mucho más alto que otros países y con tardanza. En lugar de celebrar como si estuviéramos en un partido de fútbol, tendríamos que pedir perdón a los familiares de cada una de las personas que falleció por culpa de semejante irresponsabilidad. En declaraciones al diario El País, el periodista Leonardo Haberkorn expresó con respecto a la gestión de Lacalle: “Su manejo de la pandemia -apoyado en la ciencia, el esfuerzo colectivo y la libertad individual- tuvo éxito donde otros fracasaron. Uruguay se ahorró mucho dolor y muerte. Y la opinión pública así lo reconoció.”

Lo de “apoyado en la ciencia”, llama la atención; sobre todo si recordamos que a principios de enero, Daniel Borbonet, catedrático del Departamento de Neonatología de la Facultad de Medicina de la Udelar, renunció a seguir trabajando con el Grupo Asesor Científico Honorario (GACH), manifestando por escrito su desacuerdo con la política que el gobierno lleva adelante en el combate a la pandemia y a que este ha tomado medidas contrarias a las recomendaciones del GACH. Sin ánimo de ofenderle, la frase del periodista no parece apropiada para un gobierno que, tal como ha denunciado la UDELAR, recorta 43,7% al presupuesto para la investigación.

En cuanto a que “Uruguay se ahorró mucho dolor y muerte”… Creo que Leonardo, sin tener la intención, hiere a las más de 600 familias que perdieron a un ser querido por causa del covid.

  • Que con frecuencia el actual gobierno se vista con plumaje ajeno, como cuando se jactó de que la Ford Motor Company, aliada con Nordex, producirá en Uruguay las camionetas Ford Transit, invirtiendo 50 millones de dólares, y no mencionó que fue el gobierno frenteamplista que le vendió el terreno e inició las negociaciones.

  • Que este gobierno haya roto el récord de despidos y renuncias en un solo año, cosa que hemos detallado en notas anteriores. La lista es tan extensa que nos resulta imposible exponerla aquí.

  • Que también haya roto el récord de marchas y contramarchas, anunciando hoy una cosa y retirándola días después. También esta lista es extensa.

  • Que en plena crisis económica se haya restringido la obra pública, la cual hubiera significado un alivio para miles de desocupados.

  • Que los legisladores derechistas se quitaran de encima, mediante la “ley Gandini”, la obligación de rendir cuentas de sus gastos tras sus viajes, pudiendo apropiarse del dinero sobrante de los viáticos.

  • Que mientras se cuestiona a Toma por lo que gastaba en un hotel, Lacalle sacara a un médico de la Udelar (blanco, obviamente) para cuidar a su padre con sueldo pagado por el Estado. Por supuesto que no es ilegal; como tampoco lo es que un enviado del gobierno elija un hotel más caro que otro; pero hablamos de ética.

  • Que se elogie la manera cristalina con que el gobierno maneja la pandemia mientras firma un contrato secreto para adquirir las vacunas. Del Antel Arenas podrán decir lo que quieran; pero allí están todas las cifras a disposición de la ciudadanía para que pueda evaluar si se gastó bien o mal cada billete.

  • Que al evaluar al gobierno la prensa derechista no reconozca que si no fuera por el gobierno anterior, que nos dejó el Plan Ceibal, el Sistema Nacional Integrado de Salud y reservas por casi 15.000 millones de dólares, la pandemia hubiera provocado un casos.

  • Que se acelerara el retiro de Ernesto Talvi tras pedir informes a autoridades de comisiones binacionales (CARU, Salto Grande y CARP) debido a que “tienen un presupuesto mayor al de toda la Cancillería”, exigiendo “un informe exhaustivo de ingresos, uso de recursos y situación patrimonial, número de funcionarios (permanentes, asesores, contratados), forma de ingreso (concurso o contratación directa), remuneraciones y beneficios, contratos con empresas de servicios tercerizados y licitaciones para la realización de inversiones”. Mejor no hablar de ciertas cosas…

  • Que el gobierno postergue hasta diciembre de 2021 la licencia y el pago del salario vacacional de 2019 a trabajadores del sector privado, quienes, seguramente, contaban con tal dinero para ponerse al día con las deudas. Le pregunto a la prensa que elogia a este gobierno si les parece bien que se obligue a los trabajadores a financiar a sus patrones.

Y tengo más preguntas y más memoria, pero no tengo más espacio ni esperanzas de que me respondan. Mientras la Presidencia continúe con su generosidad, las noticias serán que Luis caminó con su esposa sin guardaespaldas, que Luis durmió sobre un apero, que Luis cruzó un alambrado, que Luis fue al mercado a comprar verduras, que Luis recibió a una niñita encantadora en su despacho o que comió un asado luego de surfear.

Todas las metidas de pata de la semana se podrán minimizar, por ejemplo, con una llamada a una torre de control.
En fin, nos queda un año menos de circo.

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