Primaria inauguró las obras de remodelación de la escuela Nº 197, donde se imparten clases para niños y niñas sordas. La inversión tuvo un costo de $ 162.200.000, equivalentes a poco más de US$ 2 millones.
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El consejero de Primaria, Héctor Florit, indicó que los ambientes remodelados implican «espacios nuevos totalmente adaptados y accesibles, que permiten desarrollar talleres así como alojar jóvenes y adultos de la comunidad sorda, y que es un orgullo para la educación pública uruguaya», sostuvo.
Esta escuela fue fundada en 1910: «Es la primera escuela especial, y reconoce en la comunidad sorda una población con necesidades educativas especiales y que es correcto que tengan un espacio donde establecer identidad, que se construye a través de los vínculos y también del lenguaje de señas uruguayo, que es una lengua como tal», afirmó Florit, y agregó: «Todo eso permite que en torno a esta institución haya innumerables afectos e historias para la comunidad sorda».
La educación en este centro de enseñanza comienza desde maternal: «La lengua de sordos uruguaya se enseña desde temprana edad, herramienta fundamental para la inserción social y comunitaria. Los intérpretes son muy importantes. Hoy tenemos una política de inclusión».
En relación a por qué teniendo una política de educación inclusiva se hace tanto énfasis en una escuela especial destinada específicamente a personas con discapacidad, Florit contestó: «Bueno, la respuesta es nuestra visión de lo que es la educación inclusiva, que es tanta educación especial como sea imprescindible y tanta común regular como sea posible. En este tránsito que atiende a cada uno según su necesidad, pasamos de fortalecer los requerimientos particulares a la progresiva autonomización hasta que la inserción social se de naturalmente en ámbitos laborales, pasando por el acompañamiento de un intérprete en una institución de educación media».
«Tenemos alrededor de 100 alumnos y además hay alumnos hipoacústicos que desarrollan su actividad en una escuela regular común con el apoyo de los maestros itinerantes. Hay otras escuelas de sordos en el país, esta no es la única, también hay en algunos lugares del interior, así como aulas que atienden a personas sordas», informó.
En el mismo predio se está construyendo una escuela para autistas, cuya inauguración está prevista para marzo: «El centro 231 se está edificando en este local porque las dos comunidades, la de los chicos con trastornos de la personalidad y las personas sordas tienen en común el tema de la comunicación. Pensamos que el poder tener estas dos escuelas en la proximidad de un mismo predio va a permitir el desarrollo de investigación de aprendizaje y de mejora de recursos didácticas de enseñanza», concluyó.