A solo cuatro cuadras de la Casa Blanca, específicamente en las calles 15 y L, siete activistas del conocido grupo Greenpeace desplegaron en una grúa de 21 metros una bandera en la cual se podía leer: «Resist» (Resistir). Los militantes ecologistas lograron colarse en un edificio en construcción cercano a la mansión presidencial y dos de ellos lograron escalar la grúa y levantar la bandera de 20 metros de largo por 10 metros de ancho. De acuerdo con reportes de prensa, la policía de Washington habilitó un perímetro de seguridad en el lugar, aunque ya todo el que quisiera podía observar la pancarta casi desde cualquier punto del centro de la ciudad, incluso desde la Casa Blanca. https://www.youtube.com/watch?v=idrLwRDotiI Greenpeace explicó luego que la protesta es una respuesta a los ataques de Trump contra el medioambiente. «Aún no lleva ni una semana en el cargo y Trump ya ha dado luz verde a la construcción de los oleoductos de Dakota y Keystone XL, contra los que tanto hemos luchado durante años y cuya construcción conseguimos que fuese paralizada por la Administración Obama», señaló la organización en su página.
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Este martes el flamante presidente estadounidense firmó cinco órdenes ejecutivas que reactivan la construcción de los dos polémicos oleoductos, al que también se oponen tribus indígenas de su país.
Además, el nuevo gobierno pospuso la implementación de al menos 30 normas medioambientales, a la vez que congeló los contratos y prohibió la comunicación en redes sociales de la Agencia para la Protección Ambiental, EPA.
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