Entre el 1o y el 28 de febrero se podrán cambiar de institución los usuarios del Fondo Nacional de Salud (Fonasa) que estén afiliados hace más de tres años a una institución de asistencia médica y no estén conformes con el servicio que esta presta o perciban que hay una opción mejor. Están habilitadas para hacerlo al menos 1.600.000 personas, cifra que se ha mantenido relativamente estable en el correr de los años. El corralito fue creado en 2002 con el objetivo de frenar el continuo traspaso de socios de una mutualista a otra a cambio de dinero. Esa práctica, denominada intermediación lucrativa, continúa existiendo y preocupa a las autoridades, que en el último tiempo no han podido comprobar nuevos casos, pero están atentas por si nuevos casos son denunciados. Con la apertura del corralito mutual y la correspondiente difusión de datos de las mutualistas no se busca generar una competencia entre los centros, pero sí que los usuarios conozcan la calidad atencional de cada uno de ellos. Quienes están habilitados para cambiarse de mutualista son quienes llevan tres años o más afiliadas a la misma institución de salud al 31 de enero de 2017. También pueden hacerlo quienes estén asociados de oficio a la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) y quienes comenzaron a trabajar y nunca tramitaron su ingreso a una institución de salud. El período para cambiarse de mutualista está comprendido entre el 1o y el 28 de febrero. La tramitación del traspaso No es necesario realizar ningún trámite específico para que se haga efectivo el traspaso de institución de salud. La persona únicamente tiene que presentarse en el nuevo centro del que quiere ser socia y automáticamente es ingresada al sistema. De esa manera, no tiene que ir al centro del que dejó de ser afiliada. Un requisito importante para cambiar de prestador es asistir con la cédula de identidad. Por otra parte, la historia clínica de la persona está en custodia de cada institución, pero es del usuario. En el momento en que se cambia de mutualista, debe ser transferida automáticamente al nuevo centro de salud, sin costo alguno. El MSP se propuso para los próximos cinco años que todos los usuarios tengan una historia clínica electrónica. La informatización de datos busca facilitar también las recetas de medicamentos, que muchas veces son inentendibles. Las excepciones Existen excepciones para quienes pueden cambiarse y no cumplen los requisitos antes mencionados: haber cumplido tres años de afiliación en un mismo centro por medio del Fonasa o estar asociado de oficio a ASSE. Pueden hacerlo quienes estén disconformes con el servicio recibido y quienes se hayan cambiado de domicilio en los últimos años. Pueden hacerlo en cualquier época del año, no necesariamente en febrero, presentándose en la Junta Nacional de Salud (Junasa) (18 de Julio 1892). Las opciones Como en los últimos años, se encuentra activo el portal atuservicio.uy, una herramienta lanzada por la organización DATA y la cartera para facilitar la decisión de los usuarios, quienes pueden comparar los datos de los prestadores de salud. En esa página se les informa sobre tiempos de espera, grado de satisfacción de los usuarios, precios de tickets y órdenes, cumplimiento de las metas asistenciales, número de afiliados y de recursos humanos cada 100.000 usuarios. Las autoridades sanitarias recomiendan tener en cuenta la cercanía geográfica al domicilio, el costo de los medicamentos, las órdenes y los tickets, y el tiempo de espera para conseguir una consulta y tener la seguridad de que en ese centro están los especialistas necesarios, más aun si se padece una enfermedad crónica.
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Exhortación del MSP
A principios de enero, el MSP, por medio de la Junasa, se adelantó a las infracciones a la normativa que se pudieran producir por medio del envío de un comunicado al conjunto de prestadores, en el que los exhortó a “evitar la intermediación lucrativa”. Tal delito, tanto si es cometido por el personal propio o por terceras empresas, es pasible de denuncia penal y será notificado por la cartera a la Justicia “en caso de contar con pruebas”, para lo cual se solicitó la asistencia de la población. Para anticipar prácticas desleales y delitos, el MSP optó por enviar ayer a los actores involucrados un comunicado en el que les solicita que, en caso de contratar los servicios de una o más empresas para la captación de usuarios amparados por el Seguro Nacional de Salud (SNS), se remitan a un “testimonio o copia fiel” del mencionado contrato, así como al listado del personal destinado para la tarea. La documentación deberá ser remitida a la Junasa mediante correo electrónico, en un plazo de 20 días corridos. “Queremos señalar que vamos a utilizar todos los medios disponibles para no tolerar que el dinero que todos aportamos al Fonasa se destine para otras cosas que no sean mejorar la asistencia de la población”, afirmó el ministro de Salud, Jorge Basso. Dijo que se trata de una preocupación compartida con los ministerios de Economía y Finanzas y del Interior y con funcionarios de los centros de salud que advirtieron a la cartera sobre el comienzo de dichas prácticas. El año pasado, dos personas –de las 12 que inicialmente fueron detenidas por el Departamento de Delitos Económicos de la Dirección Nacional de Crimen Organizado e Interpol– fueron procesadas con prisión por ofrecer dinero para incentivar el cambio de mutualista. Las cifras iban de los 800 a los 3.000 pesos para el que se comprometiera a llevar también a uno o más hijos. Consultado al respecto, Basso sostuvo que la investigación sigue en el ámbito judicial y que, por este motivo, no haría declaraciones. La intermediación lucrativa puede ser penada con entre cuatro y 24 meses de prisión. Basso reconoció que las instituciones “tienen todo el derecho de hacer propaganda para afiliar”, pero reafirmó la necesidad de que sean cautas con su uso, ya que “esos dineros también salen del Fonasa”. Control ciudadano El MSP se encuentra a la espera de pruebas para poder actuar contra quienes ofrecen dinero para incentivar el cambio de mutualista: “Es a partir de la información recibida –videos y grabaciones– que podemos realizar la denuncia correspondiente ante la Justicia; por eso pedimos a la población [que cuente con pruebas] que concurra a la Junasa, a la oficina de atención al usuario acá, en Montevideo, o a las direcciones departamentales de salud de todo el país”. Las denuncias se pueden hacer de manera anónima. “Vamos a ser inflexibles, porque necesitamos frenar este fenómeno”, insistió. Basso también anunció a principios de enero que se realizarán auditorías sobre las afiliaciones registradas en el mes de la movilidad regulada y que, en caso de verificarse irregularidades, se aplicarán “las mayores sanciones económicas” al prestador. También recordó que “tanto los directores como los administradores de las instituciones que integran el SNS son responsables penalmente en el caso de constatarse intermediación lucrativa”, ya sea que esta sea realizada por el personal propio como por terceros.