Las grabaciones de «El Pepe, una vida suprema” comenzaron en el año 2013 y durante mucho tiempo el equipo de filmación acompañó al expresidente en sus viajes por el mundo y en su vida cotidiana con la finalidad de rescatar la historia de vida de quien para Emir Kusturica representa un héroe. El documentalista, que manifestó ser un gran admirador del exlíder tupamaro, confesó que uno de los nombres que manejó para su película fue justamente «El último héroe». El experimentado cineasta, que ya era conocido por sus obras como «Tiempo de Gitanos» o «Gato blanco, gato negro» comenzó a idear este proyecto en el año 2008 durante una visita que hizo a Uruguay. «Impresionado por él y por su trabajo, y también triste por no haber tenido un presidente como él, decidí hacer esta película, celebrando la virtud y la posibilidad de una utopía”, afirmó el realizador. En 2011, el cineasta fue contactado por los uruguayos Marcelo Carrasco, Julián Kanarek y Andrés Copelmayer (exjefe de gabinete del Ministerio de Transporte y Obras Públicas) para comenzar a planear la producción. La película de Kusturica relata el día a día de un jefe de Estado y de Gobierno que vivió los cinco años de mandato en su humilde hogar de siempre y manteniendo sus mismas costumbres. “¿En qué otro lugar puedes ver a un presidente que sale de la oficina y la gente se vuelve loca expresándole amor? No tengo ni idea. Tengo 60 años y nunca he visto algo así”, declaró Kusturica en una rueda de prensa durante las grabaciones. “El objetivo de la película es mostrar a una persona única que la historia recordará”.
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