Tanto los dirigentes tricolores, como el asesor de contrataciones, Hugo De León, dicen que es imposible detener a un jugador cuando pretende partir y no es un mal negocio para Nacional la partida de su capitán y goleador de los últimos dos años. Ayer hubo muchas reuniones, empezando por el presidente José Luis Rodríguez e Iván Alonso. Luego se continuó con los gerentes y finalmente conversaron los presidentes de Nacional y River Argentino. A todo esto Alonso se va, viajará a realizar una revisación médica y de estar todo correcto se firmará un contrato de un año y medio entre Alonso y River, con un buen sueldo para el jugador que a los 36 años se encuentra en un equipo de primer nivel que defenderá la Copa Libertadores de América y peleará por el torneo argentino como es costumbre. Lo que no está solucionado es el dinero que recibirá Nacional. Se hablaba de 500 mil dólares, plata y no jugadores, River habla de 200 mil dólares y dos amistosos a reparto de ganancias. Los tricolores quieren dinero.
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