Con solo los votos del Frente Amplio (FA) la Cámara de Senadores aprobó el proyecto de ley de reforma del Servicio de Retiros y Pensiones Militares, o Caja Militar. Fueron 16 votos en 29 y ahora la iniciativa será remitida a la Cámara de Representantes.
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La sesión del Senado estuvo marcada por el cruce de visiones entre la oposición y el oficialismo que dejaron en evidencia las distintas visiones ideológicas sobre el tema. E incluso hubo anuncios de derogarla “cuando cambien las circunstancias políticas”.
Para la senadora socialista Mónica Xavier la realidad justifica una reforma, la que “se hace imprescindible” en función de la “justicia tributaria”. En respuesta a las acusaciones blanqui-coloradas sobre una especie de revancha o venganza de la izquierda respecto a los militares, la legisladora reiteró que esta reforma no se hace a partir de “resentimientos” sino en función del déficit estructural de la Caja Militar.
En la misma línea se expresaron Yerú Pardiñas y Enrique Pintado. Para Pardiñas este proyecto “sirve para solucionar uno de los tantos problemas que tiene el país. Y no se trata de ninguna cuestión ideológica o de revancha. Es una cuestión de estricta justicia e igualdad”. En tanto que Pintado afirmó que es una reforma “necesaria pero no suficiente. No nos mueve ninguna animosidad, ninguna cuenta con el pasado con nadie”.
Germán Coutiño (Partido Colorado) afirmó que la iniciativa “representa un duro golpe para nuestras fuerzas militares”. Y dejó en el aire una frase que sonó como una admonición al decir que tendrá consecuencias “insospechadas” ya que a su entender alterará la “disposición táctica” y el “espíritu de cuerpo” de la fuerza.
Javier García (Partido Nacional) dijo que “se discutió desde los resentimientos y los odios del pasado y no desde el Uruguay del futuro”.
Fue Jorge Larrañaga quién anunció su intención de derogarla, y de paso cuestionó al presidente de la República. “Vázquez debió asumir otro papel en su función de Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas. Prometemos revisar esta ley en caso de aprobarse por injusta cuando cambien las circunstancias políticas. No corresponden los ajustes revisionistas”, sentenció el líder de Alianza Nacional. “Este es un proyecto de daño permanente a las FFAA y en este proyecto hay un combo de circunstancias donde ha imperado en algunos sectores del gobierno un conjunto de estigmas, prejuicios y resentimientos”, agregó.
Durante la presentación del proyecto, la senadora Constanza Moreira afirmó que “es innoble que un país de nuestras dimensiones y sin conflictos fronterizos gaste dos puntos del PIB en las Fuerzas Armadas. Esto es incompatible con cualquier idea de desarrollo, esto es bajar el costo del Estado»
La iniciativa, aprobada en Comisión la semana pasada, consta de 79 artículos e introduce algunas modificaciones al proyecto remitido por el Poder Ejecutivo.
Entre otros, los cambios tienen que ver con el tiempo de transición y la tasa de reemplazo. Por otra parte, establece que una vez aprobada, entrará en vigencia el 1º de enero de 2019.