“Castigada por contar las cosas que pasan en la Fiscalía General. Me trasladan a las fiscalías del viejo código (CPP 1980) para que no moleste. Total avasallamiento de la carrera. En lo personal no sé si me perjudica salir de este caos, pero no deja de ser una persecución”. El mensaje de la fiscal Gabriela Fossati a través de su cuenta en la red social de Facebook, sacudió la interna del Ministerio Público. La Fiscalía General de la Nación dispuso en las últimas horas el traslado de Fossati desde una Fiscalía de Flagrancia y Otros Delitos a una Fiscalía CPP 1980 –que atiende las causas iniciadas antes del 1º de noviembre de 2017-. El traslado se dispuso junto a otros sesenta movimientos a la interna de la Fiscalía. Estos movimientos incluyeron la designación de los cinco fiscales que lograron el ascenso en el último concurso interno (Rodrigo Morosoli, Silvia Pérez, Ricardo Lackner, Mirtha Morales y Angelita Romano) como fiscales de Flagrancia y Otros Delitos. Para esto, la Fiscalía concretó varios cambios en su organigrama que –como informó Caras y Caretas Portal – implican los traslados de los fiscales Diego Pérez, María de los Ángeles Camiño y Alba Corral. Otro de los traslados fue el fiscal Ricardo Perciballe, quien asumió en la Fiscalía Especializada en Crímenes de Lesa Humanidad. También de Fossati, que expresó su malestar con la medida. La fiscal aseguró, a través de sus redes sociales, que el traslado era parte de una persecución en su contra, por sus permanentes críticas a la implementación del nuevo Código del Proceso Penal (CPP), la sobrecarga de trabajo que se genera y la imposibilidad de investigar los delitos que se denuncian. La fiscal apuntó que esta medida la afectaba ya que hace poco inició un curso de posgrado sobre el nuevo CPP y ahora dejará de aplicarlo. En este marco, la fiscal envió una nota a la Asociación de Magistrados Fiscales del Uruguay (Amfu) en la que denuncia la presunta persecución. En su respuesta, la Comisión Directiva de Amfu dijo compartir la inquietud, ya que se observa “la existencia de traslados sin justificaciones sustantivas que no llegan a ser cmoprendidos por los operadores”. La carta dice entender el malestar de Fossati: “Lo que corresponde en principio es nuestra manifestación pública de desagrado por la medida. […] La modalidad de traslados inconsultos a fiscales de amplia trayectoria y sin invocación de motivaciones concretas, no aparece en concordancia con las necesidades de transparencia en la motivación de las resoluciones administrativas que afectan a los interesados y al servicio que deberían ser impecables”. Asimismo, la Comisión Directiva señala que es conocido por todos los operadores las críticas y dudas de la fiscal Fossati sobre la existencia “de criterios objetivos para la asignación de casos” por la unidad de Depuración, Priorización y Asignación (DPA), que se encarga de la distribución de causas entre los fiscales. “Si las asignaciones se realizan únicamente por criterios de volumen de trabajo, dicho criterio atenta con la cristalinidad y aleatoriedad que debería primar al momento de asignación de cualquier denuncia”, señala la carta. Y se agrega que las críticas de Fossati serán atendidas. Este viernes, el fiscal adjunto de Corte, Ariel Cancela, rebatió estas críticas y afirmó que todos los traslados que se hicieron obedecen tiene como objetivo “cumplir con las finalidades” del servicio. Y aseguró que “las resoluciones de la Fiscalía, que es el acto administrativo por el cual se disopne los traslados, están debidamente fundamentados”. Sobre la denuncia de Fossati de ser víctima de una persecución, Cancela fue concreto: “Eso corre por cuenta de la subjetividad de quien lo dice”. En tanto, la decisión del traslado no tiene relación con las críticas de Fossati al funcionamiento del nuevo CPP ni implican una persecución, dijeron fuentes de la FGN a este medio. Y fueron categóricos: “A Fossati la ascendió el fiscal de Corte, Jorge Díaz, mediante un ascenso sin concurso –en ese momento no estaban instalados y se la designó, primero en Adolescentes, después en Penal y después en Otros Delitos, siempre a su pedido. No integra la dirección de Amfu y realizó críticas al nuevo CPP pero no fueron las más duras”, expresaron las fuentes. Según informó este viernes el diario El Observador, el traslado de Fossati estuvo vinculado con una serie de críticas y denuncias recibidas por la Fiscalía General de la Nación por parte de abogados de víctimas de delitos. Estos profesionales alegaron que debieron esperar horas para ser atendidos por Fossati o integrantes de su equipo y que no fueron tratados con el respeto que merecía la situación. Esta situación es contraria a la idea de la FGN de priorizar la atención a las víctimas de la violencia y la delincuencia. Sin embargo, Fossati cuestionó la información, esta vez a través de su cuenta en Twitter: “Parece que se viene el ataque y el agravio personal. Ya me alertaron que se está brindando información sobre presuntos malos tratos a victimas que se enojan porque no se les da la razón. Todas mis entrevistas están grabadas en el sistema. La ‘institución procurando ensuciar’. A pesar de estar en reposo por estrés, como fui avisada que la ‘institución’ pretende ‘enchastrarme’ a través del periodista Gabriel Pereyra, […] me defenderé. Me niego a tratar como ‘delincuentes’ a los denunciados o a los denunciantes como ‘victimas’ sin evidencia”, escribió.
Hacete socio para acceder a este contenido
Para continuar, hacete socio de Caras y Caretas. Si ya formas parte de la comunidad, inicia sesión.
ASOCIARME