Hacete socio para acceder a este contenido

Para continuar, hacete socio de Caras y Caretas. Si ya formas parte de la comunidad, inicia sesión.

ASOCIARME

VAMOS A LA PLAYA, OH, OH, OH, OH, OH

Sol, playa y el cuidado de los niños

La playa es un sano esparcimiento durante la época estival, pero si se tienen niños se debe tomar algunas precauciones. Qué hay que tener en cuenta para que el día sea de disfrute para todos.

Suscribite

Caras y Caretas Diario

En tu email todos los días

Ahora sí, pasaron las tormentas, volvió el sol y el espacio público que más se utiliza en esta época es la playa. Si se va con niños, se sabe que habrá trabajo extra. Si bien hay cosas que son comunes a todas las edades: evitar playa entre las 10 y las 16 horas, llevar sombrilla en caso de estar en las horas de sol fuerte, hidratarse, ponerse protector con filtro solar, cubrir la cabeza, Caras y Caretas Portal le recuerda las cinco cosas que no debe olvidar si tiene planeado ir a la playa con los pequeños. 1- Hidratarlos antes de salir de casa y llevar agua fría (si se carece de conservadora, una idea es poner una botella con agua a congelar el día anterior), o dinero para comprar en la playa. 2- Ponerles el protector solar (con filtro nunca menor de 30), media hora antes de la exposición al sol, luego de cada inmersión, o cada dos horas máximo, en caso de que no se metan al agua. 3- Llevar gorro. 4- Llevar una muda de ropa seca, para evitar que vuelvan mojados e incómodos. 5- Armar un pequeño bolsito de primeros auxilios, que contenga: curitas, alcohol, una pinza de cejas (por si es necesario sacar alguna astilla) y alguna solución contra el roce de las aguas vivas (el amoníaco es ideal).   Los niños y el mar Por lo general, a los niños les gusta los baños de mar. Cuando son pequeños suelen quedar en la orilla y siempre -sin excepción- deben estar con un adulto al lado. A medida que crecen, la situación cambia, pero no los cuidados, ya que los niños se vuelven más intrépidos con los años. Jamás se les debe dejar en el agua sin la supervisión de un adulto, lo cual no quiere decir estar en el agua con él. Por eso es conveniente que el sitio donde se instale sea cerca de la orilla, para no perder al niño de vista. Si se va con otros adultos, es conveniente que se turnen para cuidarlo. Si es más de un niño, el adulto deberá estar más alerta y se recomienda que estando en el mar estén cerca uno de otro. Cuando el niño tiene los años suficientes para entrar al agua solo, se le deben dejar algunas señas bien claras, las que, de ser necesario el adulto pueda ejecutar y el menor entender: moverse más a la izquierda o a la derecha, acercarse a la orilla, salir del agua, etcétera. También se le deberá marcar hasta dónde puede entrar, y el agua no podrá superar la zona de su cintura (para evitar que pierda pie ante algún pozo o desnivel en el lecho). En los niños más pequeños, hay que supervisar que no coman arena. Con estas precauciones el disfrute está asegurado.

Dejá tu comentario

Forma parte de los que luchamos por la libertad de información.

Hacete socio de Caras y Caretas y ayudanos a seguir mostrando lo que nadie te muestra.

HACETE SOCIO