La Fortaleza de Santa Teresa y el Fuerte de San Miguel reabrieron sus puertas al público luego de varios meses cerrados por la pandemia. Estos sitios son museos, por ende, la nueva normativa permite su apertura y visita.
Noticia destacada |
Hacete socio para acceder a este contenido
Para continuar, hacete socio de Caras y Caretas. Si ya formas parte de la comunidad, inicia sesión.
ASOCIARME
Caras y Caretas Diario
En tu email todos los días
La reapertura se realiza «bajo un estricto protocolo», aseguran desde la Intendencia de Rocha. Será obligatorio el uso de tapabocas al ingresar a los atractivos y durante toda la visita, donde además se controlará la temperatura y se solicitarán datos personales.
El costo de ingreso, tanto para la Fortaleza de Santa Teresa y Fuerte de San Miguel, se mantiene en $50 (pesos uruguayos) por persona; los menores de 12 años y mayores de 65 años ingresan gratis. Por el momento no se retomarán las visitas guiadas.
Fortaleza de Santa Teresa
La trayectoria de la Fortaleza se remonta al año 1762. Los portugueses, previendo un nuevo conflicto con España, decidieron fortificar el punto, por aquel entonces llamado Castillos Chicos.
Sus muros fueron construidos de una doble pared de piedra de sillería y unidos por estribos. El espacio entre ambos fue rellenado con tierra y cascotes para formar el camino de ronda y resistir las vibraciones de los disparos de la artillería enemiga.
Dentro de este monumento se pueden vivenciar siglos de historia. Pasó a manos de los orientales en 1825 y permaneció abandonada mucho tiempo hasta que fue redescubierta por el historiador Horacio Arredondo, quien comenzó las gestiones para su reconstrucción en el año 1928.
Fuerte San Miguel
El Fuerte San Miguel fue construido por los españoles en 1734, y tomado por los portugueses tres años después. Luego, fue reconquistado por los españoles en 1763, aunque su importancia militar decayó notoriamente poco tiempo después. Testimonio de la historia colonial, lo declararon monumento histórico nacional en 1937.
El Fuerte de San Miguel, forma parte del Parque Nacional San Miguel, que ocupa unas 1.500 hectáreas del departamento de Rocha, y forma parte del Sistema Nacional de Áreas Protegidas (SNAP).
Dejá tu comentario
