Frente Amplio cuestionó rumbo económico del gobierno

Lo expuesto por la jerarca generó rechazo en el Frente Amplio. El ex subsecrtario de Economía, Pablo Ferreria, escribió en su cuenta de Twitter: «En el día de hoy asistimos a una larga conferencia de prensa de la ministra Arbeleche. En su extensa comparecencia la ministra muestra con orgullo el cumplimiento de los objetivos fiscales, los cuales son una prioridad desde la campaña electoral de 2019. Y esto en si mismo es un grave error, no se puede tener en 2021 los mismos objetivos en materia económica que los que se tenían en 2019, ignorando por completo que en el medio ocurrió (y aun ocurre) una pandemia global con efectos gravísimos en materia social y económica.  No incorporar este brutal cambio de contexto en el análisis, y por lo tanto cambiar las respuestas desde la política económica es de por sí muy preocupante».

Pero los cuestionamientos de Ferreri no terminaron ahí. El dirigente frenteamplista continuó: «En segundo lugar es alarmante el enfoque reduccionista de la ministra, preocupada solamente por la variable fiscal, debería tener presente que no es sólo ministra de Hacienda, sino también, y fundamentalmente, de economía. Hablar de déficit fiscal sin incorporar la dimensión de la producción, del empleo, del consumo, del ingreso de los hogares y demás variables económicas fundamentales en un profundo error y demuestra que no hay un plan integran en materia económica. Por ejemplo, festejar el déficit fiscal cuando hay entre sesenta y cien mil uruguayos comiendo en más de 200 ollas populares, y faltan respuestas para apuntar a las pequeñas y medianas empresas (lo cual es reclamado incluso por los socios de la coalición que gobierna), o un rumbo claro para reactivar la economía (que en 2020 caerá casi un 6% y no un 3,5% como previó la ministra) como reclaman quienes proponen planes de inversión pública en infraestructura, implica una mirada hemipléjica y un tanto desconectada de la realidad que sufren miles de uruguayos».

Ferreri también dijo que «el gobierno se encierra en ese enfoque reduccionista, a contrapelo de o que se está haciendo en todo el mundo, tan es así que según el monitor fiscal del FMI en enero de 2021, el déficit fiscal del mundo en su conjunto pasó de un 3,8% del PIB en 2019 a un 11,8% en 2020, esto incluyendo a gobiernos más o menos liberales, más o menos promotores de lo público. No sólo se puso dinero para afrontar la pandemia, sino que también se redujo drásticamente la inversión pública, la cual en el Gobierno Central-BPS cayó un 7,7%en 2020 en términos reales».

Finalmente el ex subsecretario de Economía sentenció: «Urge conocer cual es el rumbo de política económica que seguirá el gobierno para hacer crecer la economía y sostener a los más afectados por la pandemia, la ausencia de la misma sólo genera incertidumbre en los agentes económicos que toman decisiones de inversión y generan empleo. La ausencia de rumbo no le sirve a nadie, ni siquiera a los malla oro».

En la misma línea se manifestó el senador Mario Bergara: «En el terreno económico y social evidentemente tenemos una visión y prioridades y énfasis diferentes de la que planteó la ministra de Economía. En primer lugar nos parece insólito que sumen peras con manzanas para tratar de dibujar engañosamente el número de los recursos que se han volcando para combatir la pandemia. Lo que se ha volcado está en el orden de los 700 millones de dólares, que es un 1,3% del PBI. Lo hemos dicho muchas veces. Es un guarismo que nos deja mal parado con cualquier guarismo internacional. Somos de los países que menos recursos han volcado».

El legislador dijo que desde el gobierno «se dicen que son 1.200 millones porque se suman 500 millones que no son gastos, que es simplemente el monto de crédito garantizado por el sistema de garantías. Es engañoso sumar 700 más 500 para ver cuanto se volcó a la pandemia. Eso no es así. Se gastaron 700, los otros son garantías, una iniciativa que todos apoyamos para aplicar recursos y empresas que tengan acceso. Eso no es gasto volcado para combatir la pandemia», sentenció Bergara.