Cabildo Abierto en ultimátum: contra la usura o a las urnas

El tono de la declaración con formato de conferencia de prensa de Cabildo Abierto del lunes 8 de mayo donde finalmente anunciaron que permanecería en la coalición de gobierno, tuvo un único punto intenso, y fue la decisión de insistir con la presentación de un nuevo proyecto sobre el tema endeudamiento, dándose un plazo hasta fin de mes para su tratamiento.

Si bien en el mismo tono marcial el senador Manini Ríos aclaró que el plazo era para ellos mismos, una lectura de por qué seguir en la coalición es para ser apoyados en este proyecto por sus socios coaligados, o poder decir: “Hasta acá llegamos”.

Porque todo el análisis político de las circunstancias en que se pidió la renuncia de la exministra Irene Moreira no podía tener otro fin que irse de la coalición.

Lo único que explica a buenos entendedores el quedarse es esta última carta. Baraja que, lejos de ser del palo de la muestra, se juega una parada difícil; primero, porque si bien este proyecto de endeudamiento es el segundo que presenta, mejorando la primera versión, también está en comisión uno presentado por el senador Charles Carrera del Frente Amplio.

Es de hacer notar que este segundo proyecto ya no cuenta con la “simpatía” demostrada por la ministra de economía, Azucena Arbeleche, con el primero.

Segundo, porque poner fechas límites, plazos, es una maniobra arriesgada en la dinámica parlamentaria.

Los acuerdos a los que necesita llegar, y parece tener voluntad Cabildo Abierto para la redacción y aprobación del proyecto, son el primer indicio de que llegarán a fines de mayo con las manos casi vacías.

Tercero, y la más importante, jugarse los boletos a poco de empezar la campaña electoral a convocar a un plebiscito va a poner en evidencia la capacidad de convocatoria de los cabildantes, lo que a la postre puede ser perjudicial a sus objetivos electorales.

En todo caso, el no votar un proyecto que hace al endeudamiento no parece ser de las facturas políticas más caras que en una campaña electoral pueda pagar el Partido Nacional y habrá que ver cuántos legisladores están dispuestos a olvidar los desencuentros en la votación de la reforma de la seguridad social.

Río revuelto

La interna de Cabildo Abierto tampoco pasa por su mejor momento para esta “pechada”; según fuentes de Caras y Caretas, antes de las discusiones que tensaron la interna sobre irse o no de la coalición, la denuncia de la adjudicación de una vivienda a una militante cabildante fue una vendetta interna.

En el momento que “ardía” el escándalo de la adjudicación con llamado a la Torre ejecutiva por parte de Delgado a Irene Moreira, una fuente cabildante nos decía: “El loki me dijo que Albornoz renunció porque Irene está haciendo cualquier matufia en el ministerio, la del apartamento a la amiga es cambio chico. Además está negociando con Delgado para acomodarse para las próximas elecciones y el general no le dice nada porque es la mujer, viene jodida la mano […] Pero en Cabildo ya saben que el que pasó el dato a la prensa fue Gabriel Albornoz”.

Al día siguiente, con el pedido de renuncia ya consolidado, otra fuente cabildante, confirmando la versión de su colega, nos decía: “Se confirmó nomas que el que entregó la info a la prensa sobre el tema del apartamento fue ‘la Carola’ Gabriel Albornoz, en Cabildo hay bruto quilombo, el loquillo Lozano anda repartiendo por todos lados, ya le dijeron que cerrara el pico, este tarado está cargando hasta al hermano, no sé pa’ qué lo tiene de secretario. Te aviso que esta caldeado el ambiente, Radelli le metió el peso a Daniel Lozano, hermano del senador”.

A la renuncia de Albornoz de vivienda, luego de su anuncio de mantenerse en la coalición, se produjo la renuncia del Director de Ancap José Luis Alonso luego de haber cuestionado al líder de su partido, Guido Manini Ríos, por haber salido en defensa de la exministra de Vivienda y Ordenamiento Territorial, Irene Moreira.

La libreta del fiado

El lunes 15 de mayo Cabildo Abierto brindó una conferencia de prensa de las de verdad, esas donde los periodistas pueden preguntar, para presentar el nuevo proyecto.

Repasando lo sucedido con el proyecto anterior, Manini recordó que “hace más de dos años Cabildo Abierto presentó un proyecto para atender la realidad de las deudas de las personas físicas. Luego de un largo período de discusión, el proyecto fue aprobado en comisión y en el plenario del Senado se decidió volverlo a comisión”.

Según informó Doménech, “el propio presidente del Banco Central ha confesado que hay 630.000 personas declaradas incobrables y alrededor de un millón de personas inscriptas en el Clearing. De alguna forma significa tener una especie de muerte civil desde el punto de vista económico”.

Entre las novedades de este proyecto, Doménech señaló que este “señala en su artículo segundo que estarán legitimados para iniciar cualquiera de los procesos mencionados en el artículo precedente, que es el que anuncia la presentación de este procedimiento de reestructura de deudas, quienes tengan un inmueble que sea vivienda familiar cuyo monto no supere 1.600.000 UI, alrededor de US$ 240.000, quien solo tenga un vehículo cuyo valor de acuerdo al Sucive no sea superior a 150.000 UI, alrededor de unos US$ 20.000, y quienes tengan ingresos anuales de unas 240.000 UI, unos US$ 3.000 mensuales. La verdadera innovación del proyecto consiste en incluir el concepto de deuda justa, entendiendo por tal el pago del monto inicialmente convenido en moneda nacional o extranjera convertido a unidades indexadas al valor de la fecha de realizado el contrato, al que se le suma una tasa efectiva anual que la misma haya generado. Serán convertidos entonces de esta manera a UI restándole obviamente lo que ya pagó”.

El fondo de la tasa

Una de las innovaciones del proyecto y sobre el cual ya parece no encontrar mucho eco ni en el sistema político ni en el financiero es el que hace al tema de las tasas de interés.

Doménech explicó que “la otra innovación del proyecto está contenida en el artículo 23. Entendemos que a esta situación se ha llegado en gran parte debido a una ley de intereses aprobada en el año 2007, que le ha permitido a los prestatarios prácticamente fijar unilateralmente las tasas de interés. Entendemos que de no tomarse alguna medida a la regulación de las tasas de interés, este problema que vivimos hoy se puede reiterar. Y en tal sentido en el artículo 23 establecemos topes máximos a los intereses tomando como base el interés que el Estado paga por conseguir su financiamiento, ya sea en moneda nacional o en moneda extranjera, o en dólares. Si es en moneda nacional, el límite será de cuatro veces el monto de la tasa de endeudamiento del Estado, y si fuera en dólares, será tres veces la tasa el Estado”.

Este proyecto está previsto para deudores con entidades o personas privadas y entidades estatales. Incluye todo tipo de deuda con el Estado, en el caso de las deudas hipotecarias deberá ser reglamentado porque tiene ciertas complejidades que no son abordadas en este proyecto.