Gerhard: "La reforma comprometerá por décadas la vida de las mayorías"

Bajo el título "La reforma que nos entierra", el legislador opinó que el proyecto denominado "de la seguridad social" debería llamarse "ajuste del sistema jubilatorio". "Se pretende reducir drásticamente los aportes que realiza Rentas Generales (que es plata de todos y todas) aumentando la edad jubilatoria y los años que debemos trabajar, y además bajando los montos que recibiremos".

Para Gerhard, el gobierno y sus comunicadores han instalado dos principios "que hemos empezado acombatir poco y tarde": el déficit en el sistema actual y la idea de que es natural trabajar más si se vive más. Sobre el primer punto, el diputado sostiene que el Banco de Previsión Social (BPS) necesita recibir aportes de Rentas Generales "porque brinda un montón de ayudas y sostiene otros tantos derechos", pero que estos refuerzos también podrían salir de sectores con ganancias extraordinarias, sectores lucrativos y otros que están exonerados de impuestos.

Por otro lado, rechazó la idea de que se debe trabajar más años porque se viven más años. "Hay una suerte de paralelismo entre la vida y un producto, como si por durar más se debe pagar un costo mayor. No somos eso, además debemos preguntarnos si puede ser de otro modo, y si ese supuesto déficit se puede cubrir de otra forma".

Y añadió: "Si bien es cierto que entre la última gran reforma del sistema, en el año 1995 y hoy, aumentó un poco la esperanza de vida, también es cierto que se triplicó el PBI [Producto Bruto Interno]. O sea, nuestro país genera tres veces más riqueza que entonces y, afortunadamente, con índices de formalidad muy superiores. ¿Por qué este extraordinario incremento no está al servicio también de evitar el aumento de la edad jubilatoria?, ¿por qué cargar las mejoras de las condiciones de vida sobre la propia vida de los trabajadores y trabajadoras?".

Para finalizar, Gerhard sostiene que el proyecto de reforma de la seguridad social "profundiza la desigualdad", a pesar de que pueda incluir algunos artículos "compartibles", y que se debe frenar porque "comprometerá por décadas la vida de las mayorías".

"La reforma no es urgente, es irresponsable e injusta porque es una nueva columna del sistema que perpetua e incrementa la desigualdad. Hace trabajar más años a personas que luego vivirán, ya de viejas y cansadas, pocos años más, privándose de compartir con sus seres queridos, de recrearse, de colaborar con diferentes causas. Ante esta reforma irresponsable con la vida, solo cabe un firme rechazo", finalizó.