Llamó la atención que el secretario de la Presidencia Álvaro Delgado no expresara su respaldo y apoyo al senador del Partido Nacional, Gustavo Penadés, cuando el propio presidente de la República lo hizo enfáticamente,
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En efecto, Luis Lacalle Pou no dudó en expresar su respaldo al legislador blanco. "Le creo a él", remarcó el mandatario, con respecto a la denuncia de Romina Celeste Papasso, militante del oficialista Partido Nacional (PN), que acusó de abuso sexual infantil al senador.
Lo propio hizo el ministro del Interior, Luis Alberto Heber, que se reunió con el senador y lo respaldó en conferencia de prensa diciendo: "La declaración de Penadés fue más que aclaratoria de la situación que estamos viviendo. Y estamos con mucha indignación con este enchastre pero no tenemos otra forma de digerir esto que no sea en la Justicia".
También llegaron respaldos de otros legisladores y referentes del Partido Nacional, pero cuando se consultó al secretario de la Presidencia y eventual precandidato a presidente por el Partido Nacional, Álvaro Delgado, prefirió no expresarse.
Delgado consideró "irrelevante" pronunciarse y aclaró que que “es un tema tan delicado” que se debe esperar que la Justicia actúe para aclarar los hechos.
“Los hechos son delicados; merecen la prudencia, la responsabilidad. Tenemos que ir a los ámbitos donde nos den garantías a todos y seriedad en el manejo del tema”, agregó el jerarca en rueda de prensa.
De inmediato se dispararon los comentarios sobre el gesto del secretario de la Presidencia, que siempre está en la línea de lo que opina el Presidente de la República, salvo en este caso.
Una fuente cercana a Presidencia dio su interpretación a Caras y Caretas: "Álvaro Delgado ya está en modo candidato, sabe que se juega mucho dando su opinión en un tema tan delicado hasta que no haya una definición de la justicia y no quiere jugarse por nadie, aunque sea de su propio partido y vaya en contra de la opinión del propio presidente. Ahora habrá que ver cuánto le cuesta esto en la interna", explicó.