Este miércoles puede ser un día clave para el conflicto en la industria láctea. Para esta jornada está prevista la reunión del plenario de la Federación de Trabajadores de la Industria Láctea (FTIL) para analizar la postura a asumir ante la convocatoria del Consejo de Salarios. El punto que tranca la firma del nuevo convenio colectivo es la cláusula de paz, que si bien es aceptada por la cámara y los sindicatos no hay acuerdo en tanto a a su alcance.
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Por otra parte se mantiene la situación generada en Conaprole por el despido de una trabajadora. Este martes hubo una reunión en la Dirección Nacional de Trabajo (Dinatra) para tratar el tema pero no hubo avances. Por la cooperativa concurrió un abogado que se limitó a reiterar la versión oficial. Para el sindicato el despido es injustificado dado que la empleada cesada no tenía problemas de conducta. “Esto generó cierto estupor en el ministerio”, dijo a Caras y Caretas Portal Luis Goichea, dirigente de la FTIL y de la Asociación de Obreros y Empleados de Conaprole (AOEC).
Sobre el conflicto Goichea dijo que en caso de no concretarse avances en las negociaciones está previsto el comienzo de medidas a partir del jueves.
Recordó que la asamblea de la semana pasada declaró que “de no existir una solución a la discusión salarial, se profundizará el conflicto de cara a la temporada de la industria láctea”. Esto se debe a que en agosto comienza a crecer la producción lechera y por lo tanto la remisión a las plantas industrializadoras.
Por esta razón esta semana se realizarán paros por empresas y en los primeros días de agosto se llevará adelante un paro general de 24 horas en toda la industria.
Simultáneamente se intensificará la agitación de la FTIL en Montevideo y Área Metropolitana para informar a la población acerca de las causas del conflicto.