La senadora del Partido Nacional, Graciela Bianchi, no deja de sorprender. Cuando todavía no se ha definido la situación de los profesores del liceo de San José y el pedido de destitución de algunos de ellos, la legisladora dio otro paso en la persecución a los docentes: este viernes dio a conocer a través de su cuenta de Twitter que solicitó informes sobre una profesora de UTU que hace unos días interpeló al presidente Luis Lacalle Pou sobre la situación de la Dirección de Educación Técnica (exUTU).
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La actitud de Bianchi generó malestar en los sindicatos. Este jueves la Coordinadora de Sindicatos de la Enseñanza de Uruguay (CSEU) emitió un comunicado en respuesta a la senadora Graciela Bianchi, que realizó un pedido de informes al Codicen sobre la presidenta de la Asociación de Funcionarios de la Universidad del Trabajo del Uruguay (Afutu), Mabel Mallo, que mantuvo un intercambio días atrás en la Torre de las Telecomunicaciones con el presidente, Luis Lacalle Pou.
CSEU indicó que la actitud de la senadora nacionalista “es otra muestra de la persecución antisindical y política a los militantes sindicalizados y a cualquier persona que exprese su disconformidad con el gobierno”.
“Estas conductas recuerdan a otra época en este país, cuando operaba el terrorismo de Estado, prácticas fascistas de un régimen sin garantías. Repudiamos enfáticamente esta política sistemática de persecución y amedrentamiento, en donde se busca censurar y suprimir la libertad de expresión”, apunta comunicado.
CSEU manifestó “su total apoyo” a Mallo, “quien siempre ha dado muestra de su ética militante y profesional”.
Por su parte, Bianchi pidió en su pedido de informe la situación funcional de Mallo, la cantidad de horas docentes que tiene, si goza de licencia sindical y la cantidad de inasistencias que tiene como docente.