Con un llamado a la reanimación de la cooperación bilateral, entre China y los Estados Unidos, Zhao Lijian, portavoz de la cancillería del país asiático, instó al nuevo gobierno norteamericano a no repetir la fallida política de su antecesor.
Hacete socio para acceder a este contenido
Para continuar, hacete socio de Caras y Caretas. Si ya formas parte de la comunidad, inicia sesión.
ASOCIARME
Caras y Caretas Diario
En tu email todos los días
En su llamado, el portavoz de la cancillería, “convocó a la administración del presidente Joe Biden a aprender la lección de la política errónea de su antecesor hacia Beijing y desarrollar los vínculos a partir de un enfoque racional y constructivo”, consigna Prensa Latina.
El llamado de China hace especial hincapié en la importancia de “reanimar la cooperación bilateral, dotar de estabilidad a los nexos y controlar las diferencias, en vez de apostar por la postura hostil del expresidente Donald Trump”.
El llamado a dejar atrás prácticas que potencian conflictos y tensiones, pretende introducir en las relaciones entre ambos países, un marco de cooperación diferente al desarrollado por la administración norteamericana anterior.
En este sentido, Zhao Lijian “insistió en la necesidad de que ambas potencias se muevan en la misma dirección, busquen impulsar lazos sanos y estables, y dejen atrás la confrontación”.
El vocero chino recordó cómo “durante la administración Trump, Estados Unidos mantuvo a China como un rival estratégico” y como “una amenaza”, argumentos que fueron pretextos “para proceder con acciones de injerencia en asuntos internos y dañar sus intereses”.
Prensa Latina recuerda, que el resultado de esta política agresiva hacia China, ubicó en su punto más bajo las relaciones entre ambos países desde 1979, año en que se establecieron relaciones diplomáticas.
“ China y Estados Unidos, como grandes potencias, comparten intereses comunes y la responsabilidad de mantener el orden, la estabilidad, el desarrollo y prosperidad del planeta (…) el conflicto daña, la cooperación es la opción correcta para ambos”, resaltó Zhao.
En su llamado, el portavoz de la cancillería “urgió a Washington a no politizar el acceso a la innovación científico-tecnológica”, así como, “dejar de lanzar acusaciones contra el país asiático y garantizar un entorno libre de discriminaciones para la colaboración en dicho sector”.
Con respecto a la posición China en los temas del área tecnológica, Lijian enfatizó “la importancia que su Gobierno concede al respeto a la propiedad intelectual y el rechazo a restricciones encaminadas a frenar el progreso de otras naciones”.
De esta forma, afirma la agencia de prensa, Zhao respondía “a declaraciones de funcionarios de Biden sobre la determinación de la Casa Blanca a asegurarse de que China no haga mal uso de los datos y tecnología de origen estadounidense”.
Estas afirmaciones desde los Estados Unidos, incluyen los dichos de la portavoz de la administración demócrata, Jen Psaki, quien había afirmado que el presidente norteamericano “abordará con paciencia las relaciones con Beijing”, ya que en su perspectiva, “ambos gobiernos están en seria competencia”.
Aunque la asunción de Biden, recuerda PL, supone la posibilidad de distenciones en las relaciones, el gigante asiático “maneja con cautela la llegada de Biden al poder”, pues (…) está convencida de que continuará la política de confrontarla con diferentes métodos”.
Haciendo referencia a analistas locales, la agencia de prensa afirma que es “muy probable” que uno de los legados que puede dejar Biden, “sea precisamente la manera de aplicar ese enfoque y distanciarse de la beligerancia alimentada bajo el mandato de Trump”.
El mejor ejemplo, en este sentido es Taiwán, donde “Biden buscaría una estrategia balanceada, favorable a la estabilidad y de no confrontación con Beijing, lo cual reduciría una potencial acción militar en la isla”.
Bajo la gestión de Joe Biden se espera, según los analistas locales, que continúen las medidas de Trump contra Hong Kong, pero a diferencia de Trump, “sin usarlo como peón de ajedrez”.
En sus evaluaciones, estos analistas visualizan una persistencia de la discordia en el caso de Huawei y un ligero cambio en “la ofensiva tecnológica si firmas como Tik Tok o WeChat evitan conflictos”.