Joseph Blatter y Michel Platini reiteraron su inocencia cuando los dos ex dirigentes del fútbol fueron cuestionados durante el segundo día de un juicio por cargos por haber defraudado a la FIFA.
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Cuando fue preguntado por la factura de dos millones de francos suizos por parte del abogado de la FIFA, Blatter, que fue el máximo responsable de la institución entre 1998 y 2015, se negó a contestar y alegó: "No responderé preguntas de la FIFA porque desde marzo de 2016, el presidente de la FIFA (Gianni Infantino) nunca me contestó".
Por su parte, Platini acusó a la FIFA de haber cometido “un escándalo” contra él y su compañero de 86 años, "con el objetivo por todos sabido de que no me convirtiera en presidente de la organización". El francés de 66 años fue también interrogado por el abogado de la FIFA, al que le replicó: “No responderé a una casa (FIFA) cuyo presidente esté acusado”.
Blatter llevaba 17 años como presidente de la FIFA cuando renunció en junio de 2015 debido a un escándalo de corrupción. Unos cuantos meses después, fiscales federales suizos revelaron una investigación sobre el pago de 2 millones de dólares de la FIFA a Platini cuatro años antes.
Ambos niegan haber cometido un delito y también han cuestionado cómo el controvertido pago trascendió a la luz pública, con denuncias no comprobadas de que los fiscales se reunieron con un delator en la banca de un parque.
Acusados de fraude, gestión desleal, abuso de confianza y falsificación documental, Blatter y Platini rechazaron todos los cargos en su contra y lamentaron el sufrimiento que acarrean desde que comenzó la investigación en 2015. "Van siete años de castigo, una eternidad", sentenciaron.
Ambos ex dirigentes se exponen a cinco años de prisión por actuaciones fraudulentas contra la máxima entidad del fútbol mundial.