El tema está en boga, el pedido de renuncia a la directiva por parte de un grupo de jugadores, el Tribunal de Honor no encontró elementos para fallar; pero es la primera vez que recordamos que pasa algo por el estilo. Por eso fuimos a hablar con Juan Ricardo Faccio, presidente de Tribunal de Honor y uno de los últimos de la vieja guardia, quien nos atendió amablemente en su casa. Porque la Mutual tuvo un punto de partida y gente que trabajó mucho, como por ejemplo Dalton Rosas Riolfo, un adelantado a su época en lo empresarial, el carnaval y lo deportivo. -El tema de la Mutual se ha movido mucho y uno recuerda otras épocas de la mutual vos sos de los que queda de la vieja guardia de cuando se fundó y aprendiste de aquellos hombres ¿no? «Indudablemente, en el 46 empieza la lucha de la mutual, que se funda el 6 de agosto de 1946 , con tipos trascendentes como Enrique Castro y Dalton (Rosas Riolfo) pero alrededor de ellos hubo inolvidables luchadores, te digo Roberto Porta por ejemplo, porque venia a la casa de mi abuelo, yo vivía en el 2030 de Gustavo Gallinal en aquella epoca Junta Económica y habia dos entradas en el corredor, pegadito vivia mi abuelo, Roberto vivia con sus padres, un soltero empedernido y cuando dejó el futbol se casó, y también venian Dalton y Enrique (Castro) intimos amigos a poner las primeras rocas, porque no son piedras, rocas de la mutual, asi fue como escuche como empezo la mutual, Enrique, con toda razón era el genio, el creativo, pero algun dia tendriamos que hablar de Dalton casi exclusivamente, de Dalton porque en todos los lugares que fue dejo una huella siempre positiva, no habia nada mas aburrido que la doma me llevaba mi papa que era de Durazno hasta que un dia me anime y le dije: Ya esta, yo me aburro aca, veo siempre lo mismo veo muy bien, los jinetes, despues la vuelta al ruedo, la emocion, el aplauso y después otra vez lo mismo y Dalton la transforma, la lleva a la cancha de Bella Vista, y lo se por boca directa de dos de los tres famosos que te voy a mencionar. Dalton descubre a la famosa negra argentina, Mercedes Sosa, y dos hombres que me lo dijeron ellos, un dia estoy en Santa Fe de Bogota y en el mismo hotel que concentrabamos estaba hospedado Horacio Guaraní, se me acerca y me dice: ‘Me entere que sos uruguayo, a mi me descubre y me lanza al estrellato en la criolla de Bella Vista, Dalton Rosas Riolfo’ y ahí Horacio me habla de Mercedes Sosa, que la Negra le habia dicho que en Uruguay habia un empresario que creia, que habia jugado al futbol y que confiaba en él. Otro que se inició con Dalton fue el «Canario» Luna, un tipo muy agradecido, nunca se olvidó de donde salió». -¿Se puede decir que fue de los primeros empresarios musicales? «Fue el primero, el carnaval lo cambio Dalton, él transforma la alegría del carnaval en seriedad profesional, en cuanto a espectáculo, en aquellos tiempos vos podías esperar toda la noche que llegara uun conjunto, es el primero que en el Jardín de las Comparsas, a unas cuadras de la Mutual, crea el tablado con platea, eran unos tablones sobre cajones o algo más sólido, pero además había un programa y se cumplía, metía cuatro o cinco conjuntos que estaba una hora sobre el tablado. Bueno cambió la monótona doma, con todo respeto, para mi ahora la rural es otra cosa, es un paseo, un espectáculo de otro carácter, antes era otra cosa, ataban un caballo le vendaban los ojos, se subía uno, lo daban contra el suelo y después, cuando podía el ser humano, nosotros lo aplaudiamos y eso lo cambio, los palladores por todo Uruguay los esperaban en todos lados». -¿Era como un circo andante ? «Era asi, a parte tenia las calesitas por los barrios y ademas el uruguayo es lo mas contra que hay, no le digas que tenés un resfrío, porque te dice que el que tiene él un resfrío mas grande que el tuyo, es naturalmente contra, ahora se quejan de la calidad del fútbol uruguayo, somos 3 millones, bueno no me quiero ir del tema ese porque quiero seguir con Dalton». -Si quedate un poquito con Dalton, porque tenía una incidencia cutural grande ¿no? «Si, pero espera una cosa, el papá de Dalton fue uno de los primeros maestros que siguen a Varela. Es uno de los que cambian la educación primaria de Uruguay, en la familia de Dalton te encontras con médicos, con contadores porque hay gente que va a la Universidad a buscar un título y después se comercializa la ínfima parte, la mayoria no, yo estoy orgulloso de la Universidad de la Republica, yo no creo en las universidades privadas, hay gente notable, pero no creo en lo que se compra con plata, Carlitos que jugaba conmigo en River cuando viene de Peñarol a River, daba gusto, te hablaba y te enseñaba, te explicaba de la vida, fue un alto funcionario del Banco Hipotecario de Uruguay y José Luis tenia una academia de contabilidad, el mas chico, y en la cancha era una fiera. Pero no nos vayamos de Dalton, le cambia la historia a la doma, al folklore uruguayo, hace divinos los palladores, yo fui al mundial del 70 a verlos, y estaban los palladores uruguayos en los mejores lugares, y actuando en la plaza Garibaldi, en un teatro famoso, que era donde cantaba por ejemplo Pedro Barrios o Negrete, los cracks cantaban ahí. Dalton irrumpe al fútbol siendo un veinteañero, que tiene la cabeza abierta por la enseñanza que había recibido de la casa y de la vida, un blanco convencido, se conocía toda la historia del Partido Nacional; se encuentra con Enrique Castro, y por esto yo digo que la fecha de nacimiento de la mutual no fue el 6 de agosto, fue antes, cuando a Nacional se le ocurre, con buen ojo, comprar a Eusebio Ramón Tejera, entonces River, ligeros y activos, pide una gruesa suma de dinero por Tejera que había llegado de Bella Vista a River, donde hizo una gran campaña. Y pide una serie de futbolistas de primerísima línea, el primero, Luis Alberto Luz. Nacional le da el dinero y una lista de jugadores entre los que estaban, Luz (campeón Sudamericano) y a Enrique Castro (otro campeón Sudamericano), y no para ahí, le pide al «vasco» Urruzmendi (el padre de Pepe), Alejandro Barrios un punterito que andaba muy bien, al «negrito» Ortíz un half que volaba y a Leguizamos que era de la Tercera y que pintaba muy bien. Esto no me lo contó nadie, yo lo vi ¿Sabés quien le dijo a Luz que se iba a River? Esa mañana los jugadores se estaban cambiando en el vestuario principal, Luz era un tipo muy coqueto, muy elegante y se estaba cambiando en su locker del Parque Central, que son los mismos de ahora, de cedro, inaugurados en 1944, de repente empieza a regresar la ropa al bolso, y Porta le dice: «¿qué pasa Luis, qué estás haciendo?» Luz se da vuelta con los ojos llenos de lágrimas y no le puede contestar, y Perucho (el equipier) es el que contesta, ‘Me llamaron de la sede que tiene que presentarse en River’. Nadie le había dicho nada, Enrique Castro se había enterado escuchando la radio en un informativo temprano. Roberto Porta miró al resto de los compañeros y dijo ¿Qué vamos a hacer?, nos vamos. Ese día se creo la mutual. Dalton además había pasado a Nacional, estaba jugando en la reserva, y de ahí siempre fue el ladero de ese iluminado que era Enrique Castro en fútbol. Dalton fue uno de los nervios motores de la transformación laboral que se produce en el fútbol, yo aprendí leyendo de las actas de la Mutual, eran unos craneos, pero no hay que olvidarse de Obdulio, que te vas olvidar de Obdulio si estaba siempre, Lorenzo Pino, «Cacho» Vázquez, Sabini, Joaquín Bermúdez, «Carajito» Vázquez, Luis Ernesto Castro, Diego Flores Mora, Boris Magallanes. En el 48 hubo algunos muchachos que los llamaban los «Equivocados» por un tema de respeto, habían ido a jugar el Sudamericano cuando el resto había parado, pero no le podías decir el insulto, porque era una palabra muy gruesa que a mi al día de hoy me cuesta pronunciar, tanto es así que algunos reconocieron el error y después algunos integraron la selección campeona del mundo de 1950, se trataba de dejar siempre la puerta abierta a la reconciliación con el compañero. En esa huelga de 1948 es cuando más se fortifica el gremio porque no afloja, fundamentalmente Canillitas, con el viejo Espert (el Loco Pamento), con Peñarol Tambasco; y Canillitas ofreció todo, ahí se jugaban partidos durante la huelga, en la cancha del Forever en Colón, para no quedar parados. La personería jurídica de la mutual va más allá de un papel que la reconoce, hay vida, tiene nervio…» -¿Los cambios la han afectado a la Mutual? «Fui tres años secretario general y lo pagás, porque tenés enfrentamientos cuando luchás por lo que querés, pero lo pago al día de hoy. Tabaré Vázquez en la primera presidencia crea Gol al Futuro, invitan a Saravia, pero la Mutual dice que el indicado soy yo, me presento con Saravia en la sala Franzini del estadio Centenario, nos recibe el señor Arsuaga, un caballero, pero en un momento cuando estaba para empezar la cosa, viene Arsuaga y me dice que ellos quieren que el representante de la Mutual sea Saravia, el mismo Saravia le dice que la directiva en pleno me designó a mí. Y bueno, me pasan las facturas de mi carácter querendón, rebelde y contestatario y sea dedonde sea, ya ves que se cobran y se pagan a lo largo de toda tu vida». – En este tema que te toca vivir, vos dijiste en el Tribunal de Honor que las 599 firmas que les presentaron, tenían una validez moral muy grande, pero no tenían validez jurídica, y les dijiste que por el artículo 23 podían pedir una asamblea con 50 firmas protocolizadas… «Eso te iba a señalar, fui yo el que le dije a ellos de la asamblea, la inmensa mayoría de los que fueron muy correctos, asistidos, lo que me sorprendió, por un estudio jurídico Guyer & Regules Lawyer Account and Tax – Real Estate, me llamó la atención que a estos jugadores de primera línea profesional, que juegan en Primera A o en la B, como jugué yo, pero me sorprendió que fuera este estudio el que los asesorara, dos caballeros, un escribano y un abogado, a los cuales les dije que el estatuto de la Mutual, cuando habla de las asambleas, en el capítulo sexto, el artículo 23, dice que las asambleas extraordinarias, podrán ser convocadas en cualquier momento, a solicitud de cincuenta socios activos, y/u honorarios, o con el voto conforme de cinco votos conformes de la comisión directiva. Se los lei, les dije que esas firmas tenían un gran valor moral y espiritual, hablé de la tarea de quienes la fueron a recoger, pero del punto de vista legal, carecían de valor. Entonces tenían que darle la oportunidad a la Mutual para que vinieran esos jugadores, o ir la Mutual a los campos porque están en plena preparación, claro que yo no iba ni atado; bueno fuera que en Nacional, donde tengo tantos años de socio como de vida, o en Peñarol donde soy socio desde 1972, que incluso yendo a dirigir a Nacional, no me borré de Peñarol por gratitud, por la memoria de Cataldi, Peñarol es parte de mi vida, me lanzó al mundo. De River, donde llego a los 15 años, ¿Voy a River y no me dejan entrar, cuando lo dirigí dejando la plata que cobré para las divisionales inferiores; a Liverpool, que donde juega y contra cualquiera no quiero que pierda Liverpool, porque Bella Vista me echa porque atendía más los problemas de la Mutual que lo que debía hacer en el club y Liverpool me recibió. Estamos considerados como los quintos mejores en cuanto a gremialismo en el mundo, por los logros conseguidos, esta directiva que, con razón o sin razón, ahora es cuestionada, le acaba de cobrar en Irán lo que le correspondía al arquero uruguayo Martín Barlocco. A Vitabar se le quedaron en Costa Rica con cinco años de su salario, esta directiva se lo trajo en efectivo, y eran varios miles de dólares, lo mismo pasó con dos muchachos en Ecuador, entonces ni tan pelados ni con dos pelucas. Pero vinieron estos muchachos a reclamar y se les atendió como es debido, la directiva los derivó al Tribunal de Honor, que te digo quienes lo constituyen: Walter Corbo, Rúben Techera, Walter Mosquera, Balpardalas, Savastano que llegó a mi pedido, hay de todas las generaciones. Está también Santamaría, pero no lo vamos a hacer venir de allá (España) para esto». -¿Vos pudiste sacar una conclusión del porqué de todo esto? «Primer tengo que respetar la posición de cualquiera de los muchachos, así sea uno solo, así me educaron, hay que defender así sea el derecho individual de una persona. Los muchachos vienen con una reclamación dentro del estatuto, con esa cantidad de firmas enormes, si las teníamos que legalizar nos iba a llevar unos cuantos meses, y consta en actas que fui yo el que les dije lo que tenían que hacer. Han venido una docena de muchachos antes de la presentación de la carta con las cincuenta firmas, pero uno se pone viejo pero no se pone tan gil, todos firmaban por los derechos de imagen no en contra de la directiva, ahí le pedí al gerente, que me citara a los reclamantes, fue cuando vinieron estos muchachos, mirá que todos encantadores como el ‘Bigote’ López, Diego Scotti, muy culto y muy instruído, dos cosas que no son lo mismo, del que conozco la calidad espirutual e intelectual porque jugué con su tío con el que terminamos jugando en China, Mathías Pérez que jugó en Peñarol y me estoy olvidando de alguno, junto a los representantes del estudio Guyer & Regules, pero esa barra de abogados parece que no leyeron el estatuto, porque si hubieran hecho lo que hice recién, leerte el estatuto, venían con las cincuenta firmas protocolizadas y listo». – Ahora asamblea, pero si resuelven que la directiva se tiene que ir ¿se van? «Eso ya es un tema personal…» – Hablo de lo reglamentario «Ellos están convencidos que trabajaron bien, me han exhibidla cantidad de conquistas que han obtenido, eso es muy personal, tienen que hablar con el doctor Gumer Pérez, que es el letrado para esta situación, porque Acosta y Liotti se excusaron. Y también trabaja la escribana sobresaliente, Lilian Sosa». – ¿Alguna vez viviste una situación parecida? «No, nunca. Yo estaba en aquella escuela de Enrique (Castro), de Dalton (Rosas Riolfo), de Lorenzo Pino, sabés quien era presidente de la Mutual en la que fui secretario, Alcides Edgardo Ghiggia, si fue grande como jugador, fue más grande como dirigente, además el vicepresidente era el ‘Gallego’ Taibo, una personalidad, una claridad, una guapeza, enfrentando a lo que fuera, Bladas Douzas, Mosquera con quien seguimos juntos, Angelito Traverso, el doctor Bianchi, Mario Patrón, Veloso… Con todos ellos tuvimos una gran cantidad de conquistas, seguridad en los pagos, consentir las transferencias que hasta ahí era esclavitud, en aquel momento conseguimos el 10 por ciento de las transferencias, después otros consiguieron aumentar ese porcentaje, seguro de lesión, para la época era muchísimo, y por suerte otros siguieron por el mismo camino, e incluso los acompañé cuando fueron por las jubilaciones, hablamos con el señor Murro, una excelente persona con todas las letras, que si mañana se tira a presidente lo voto, por lo que significa su palabra, conocía los temas y yo pedí por la pensión graciable como campeón Sudamericano del «Chongo» Escalada que como trabaja en el Ministerio de Trabajo como chofer, no se le querían dar; Escalada se va enterar por acá, porque nunca supo, todo eso hace la Mutual. En el fútbol muchas veces se juzga fácil y se condena más fácil aún».
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