Discrepancias y tensiones internas
Fleitas señaló que, tras la condena de Papasso por siete delitos, Ghione se mostró disconforme con la pena de penitenciaría aplicada, pese a que otra fiscal presente consideró la sanción “razonable”. Según el testimonio, Ghione llegó a decir que Papasso “era una víctima de abuso”, lo que generó tensión entre ambas.
Dos meses más tarde, relató Fleitas, recibió un cedulón judicial que le prohibía hablar de información reservada vinculada al análisis del celular de Papasso y a testigos protegidos. “Era una mordaza judicial sobre no decir algo de alguien que no tenía ni la menor idea de quiénes eran”, aseguró.
“Improcedente e innecesario”
La fiscal sostuvo que esa medida no tenía justificación y que, en todo caso, hubiera correspondido una nota de la fiscal de Corte. “Dentro de nuestro cargo es inherente la reserva de todos los casos y menos hablar de un caso que lleva otro compañero”, enfatizó. Para Fleitas, la notificación fue “improcedente” y carente de sentido práctico.
El testimonio refuerza las dudas sobre el manejo del expediente Penadés por parte de Ghione y se suma a una serie de cuestionamientos que ahora deberá evaluar la justicia en el marco de esta nueva causa.