El Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) inspecciona el cien por ciento de las partidas de productos cárnicos que ingresan al país, antes de su venta al público, subrayó su titular, Tabaré Aguerre, al referirse al caso de carne adulterada en Brasil y sus repercusiones en el mercado local.
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Acompañado por las autoridades del Instituto Nacional de Carnes (INAC), Aguerre señaló que se busca llevar tranquilidad a la población en relación con este tema. Al respecto, destacó el carácter robusto del sistema sanitario uruguayo y la calidad de la carne nacional, reconocida en más de 140 mercados a los que se exporta el producto. Informó que se decidió suspender a tres plantas que están siendo investigadas en Brasil y que están habilitadas para ingresar con sus productos al país. No obstante destacó que en los últimos tres años no ingresaron productos de esas firmas.
Aguerre informó que anualmente se realizan entre 8 y 14 auditorías internacionales. “De hecho, este martes 21 arribó una misión proveniente de Israel, país que se ubica como el cuarto importador en volumen de la carne uruguaya”, acotó.
Consideró lamentable el episodio y aseguró que no afecta al consumidor uruguayo, por lo que no se tomó ninguna medida excepcional al respecto. No obstante, reconoció que aún “es difícil evaluar la repercusión” que el caso tendrá en el mercado uruguayo.
SUSPENSIONES
Mientras tanto el escándalo se extiende. Este martes el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria de México (Senasica) anunció que su país suspende desde el 19 de marzo todas las importaciones de productos pecuarios de Brasil hasta que las entidades sanitarias de ese país le proporcionen «evidencias científicas y garantías suficientes de calidad e inocuidad» de sus productos.
México no es el primer país que ha adoptado estas medidas. La oficina federal de Seguridad Alimentaria y Veterinaria de Suiza canceló este martes importaciones de carne provenientes de cuatro instalaciones brasileñas, indicó Reuters.
Un día antes, China y la Unión Europea también suspendieron las importaciones de carne de Brasil, a raíz de las informaciones sobre inspectores brasileños que reciben sobornos y permiten ventas de productos adulterados.
El ministro de Agricultura de Brasil, Blairo Maggi, que achaca el escándalo a casos aislados que no reflejan la situación en toda la industria, calificó de «desastre» la posible suspensión global de importaciones brasileñas. «Rezo, espero y trabajo para que esto no ocurra», declaró.