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Lucía Severino presenta sus nuevas canciones

La compositora adelantará parte de su nueva producción discográfica el próximo jueves 26 de noviembre desde las 20 y 30 horas en la Sala Hugo Balzo del Auditorio del Sodre.

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Lucía Severino vuelve a la Sala Balzo con un concierto que incluirá la presentación en vivo de los dos primeros capítulos de “UNA”, su nueva producción discográfica.

Este nuevo material se va presentando en capítulos, y cada capítulo contiene un sentido propio y a la vez es parte del todo que se va develando.

“Una” es el resultado de 3 años de composición e investigaciones musicales en distintos formatos (banda eléctrica, trio, set acústico, dúo electrónico, set sola, etc.) y una búsqueda literaria. Son 12 canciones en cuatro capítulos.

El jueves 26 Lucia estará acompañada por Joaquín Pena, Fernando Servián y Francisco Servián (Tránsito) que además tocarán parte del repertorio del disco “Presente Continuo”. Como Invitado estará Juan Asuaga, versionando a dúo algunas canciones de su primer álbum “Los días”. La apertura de la noche estará a cargo de Bastian Lacroix y Tales.

Caras y caretas dialogó con Lucía Severino para conocer más detalles sobre la nueva producción discográfica, los tiempos de pandemia y como se proyecta para el 2021.

 

¿Con qué nos encontraremos en ¨Una¨ y qué criterios utilizaste para dividir el material en capítulos?

Una son canciones que, continuando la línea ecléctica en lo compositivo apuntan para distintos lados, son muchas partes que conforman “una” como individualidad pero que también se sostiene por estar con otras y otros. Todas las letras tienen una búsqueda bastante minuciosa en su construcción y las músicas varían entre la instrumentación electrónica y el pop-rock, con algunas perlitas cancionistas más clásicas y guiños a ritmos o modos más folclóricos. También es un concepto de arte que venimos construyendo con una gran artista margarita Brum /criatura corazón que desde lo visual complementa lo sonoro.

Más allá del concepto de disco, que también manejamos como final del proceso, este proyecto se va construyendo y compartiendo a medida que se desarrolla. Es importante poder visualizar la obra, darle distintos sentidos y, valga la redundancia, utilizar múltiples sentidos para acercarla al público. La dimensión de tocar en vivo es otra parte importante y es por eso que el 26 presentamos los dos primeros capítulos.

Son cuatro capítulos y se dividen por intensidades y sensaciones. Desde el comienzo tenía una dicotomía entre canciones y temas con estructuras y sonidos más experimentales. Trabajando con el Mono Reyes en la producción, en las primeras instancias y escuchando el material encontramos esta forma de trabajar las músicas juntándolas por afinidades, en cuanto a lo que transmiten. El primero, que es el que se podrá escuchar prontamente creo es el más trabajado desde la construcción sonora más electrónica, con un componente de texturas bastante denso. El segundo capítulo, que tocaremos en vivo, tiene un tinte más naif, más despojado, si bien también tiene una construcción desde el sonido esta se da con elementos más “artesanales” con menos capas y con instrumentos y sonidos más reconocibles. En el tercero hay una búsqueda en lo literario y en la escritura en verso rimado y el último quizá sea el más trascendental en sus temáticas y el más cancionista y pop por llamarlo de algún modo.

¿En qué momento del proceso llegó la pandemia y cómo lo sobrellevaste?

La idea la empezamos a elaborar a finales de 2019, tuvimos algunos encuentros para definir la metodología de trabajo y luego en febrero comenzamos a trabajar en las canciones específicamente y en la elección del repertorio. En marzo cuando se disparó todo este asunto de la pandemia quedé como en Standby, no podía pensar mucho en nada más que el aquí y ahora, me puse a estudiar, ocupar el tiempo sin pensar demasiado. En el momento que asumí que no se trataba de un asunto de días sino de meses y vaya a saber cuántos, es que empezamos a trabajar de modo virtual sobre las maquetas que yo tenía realizadas y sobre las ideas de las canciones que aún no existían. Trabajamos mucho sobre la estructura, armonías, tonalidades, etc. Hicimos un repaso por todo el material antes de comenzar a trabajar en lo definitivo. Tuvo de bueno de estar más livianos de tiempos y ocupaciones y poder meterle una energía bastante intensiva en ese momento.  Cuando aflojó un poco la cuarentena empecé a ir al estudio a trabajar directamente sobre esas ideas que veníamos manejando. Y luego se pudo sumar la banda y pudimos realizar las jornadas de grabaciones de las dos primeras partes.

 

¿Cómo proyectar el 2021 ante un escenario tan incierto? Se puede igual, cómo es en tu caso?

Poder se puede, aunque la incertidumbre es total, imagínate que no sabemos en qué mundo estamos parados, cuáles son las posibilidades, que lugar tiene el arte y el arte en vivo, que dicho sea de paso viene siendo un sector bastante olvidado. Este mareo de cosas intento que se traduzca en la necesidad de fortalecerme como persona, como artista que dice y fortalecer los grupos a los que pertenezco, los vínculos con otros y crecer juntos para contenernos. El 2021 será un año de proceso aún, de seguir trabajando sobre las canciones y los capítulos que faltan presentar. Este es un proyecto de tiempos lentos, con el afán de que no se consuma como “comida rápida” sino que se vaya disfrutando, descubriendo sus sabores y texturas.

Por otro lado, en cuanto a las posibilidades del 2021 estoy atenta a los llamados y oportunidades que puedan surgir e intentando tener claros los espacios donde se toca en vivo para armar una agenda. Ya hay algunas lindas novedades para febrero y la idea es también encontrar la fecha y la forma de presentar el disco en su totalidad a mediados de año. Lo visualizo bastante parecido a este en cuanto a lo exclusivo de los toques, la poca cantidad de público, etc. Cosas que te limitan y te obligan a replantearte y buscar que el arte sea sostenible desde distintos lugares. Pensando mucho, buscando y abierta a nuevas posibilidades. 

***

Datos

Show: Jueves 26 de noviembre

Sala: Hugo Balzo – Auditorio del Sodre

Hora: 20.30 h

Entradas: En venta por tickantel (aforo reducido por protocolo sanitario)

 

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