La prensa internacional ha dado a conocer una serie de imágenes en que se ve al diputado opositor Juan Guaidó, autoproclamado presidente interino de Venezuela, forcejeando con la Guardia Nacional Bolivariana en un titánico esfuerzo para ingresar por la reja al recinto de la Asamblea, donde en esos momentos se desarrollaba la votación que lo ratificaría o relevaría como presidente de dicho organismo. Finalmente fue elegido como presidente de la Asamblea Nacional en Venezuela Luis Parra, del partido Primero Justicia, lo que ha sido denunciado por Guaidó como un golpe parlamentario en su contra.
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Los hechos dados a conocer desde diferentes sectores, que mayoritariamente incluyen a los partidos de la oposición al gobierno de Maduro, dan cuenta de que se trató de un nuevo montaje mediático de Guaidó, quien hubiese podido ingresar sin ninguna dificultad al recinto de la Asamblea por la puerta principal, tal como lo hicieron los demás representantes, pero que inicialmente insistió en hacer entrar por la fuerza a varios miembros de la Asamblea que se encuentran sancionados por diferentes causas y que llevan varias sesiones sin participar.
Teniendo en cuenta que dichos parlamentarios no estaban habilitados para ingresar a la sesión, Guaidó decidió organizar un espectáculo mediático en las afueras del edificio; sin embargo, la participación en la sesión fue corresponsable con la ley, pues en esta se encontraban 151 de los 167 parlamentarios, sobrepasando el quórum requerido para la elección. De los 151 votos, 81 fueron para la fórmula Luis Parra de Primero Justicia, presidente; Franklin Duarte, partido Copei, primer vicepresidente; José Noriega, Voluntad Popular, segundo vicepresidente; Negal Morales, Acción Democrática, secretario y Alexis Vivens, Voluntad Popular, subsecretario.
Las primeras declaraciones de Parra como presidente de la Asamblea, hacen referencia a que el show armado por Guaidó, fue la única respuesta que este encontró ante la evidente falta de apoyo a su sector dentro de la Asamblea, de acuerdo con las declaraciones de Parra, Guaidó «no entró sencillamente porque no tenía los votos»; al mismo tiempo Parra señala que la cúpula de los diputados de la oposición como Henry Ramos Allup, Édgar Zambrano o Stalin González, no tuvieron ninguna dificultad para entrar e hicieron parte de la sesión, por lo que los reclamos de Guaidó carecen de fundamento.
Más allá de las declaraciones sobre el procedimiento de elección dentro de la Asamblea el día 5 de enero, lo que muestran los miembros de dicho organismo, que sigue teniendo mayoría opositora, es que el proceder de Juan Guaidó en su papel como parte de la oposición no es respaldado por un importante sector de la misma. Los casos de corrupción dentro de sus filas, así como los vínculos del mismo con sectores del paramilitarismo colombiano, no caen bien en las filas opositoras, quienes en palabras de Parra «… nos cansamos del secuestro y queremos abrirle un camino a la despolarización del país…».
Fue por estas razones que Guaidó no logró el apoyo de la oposición en la Asamblea, por estas razones trató de meter por la fuerza diputados suspendidos, para sumar votos, y como no lo logró, terminó armando todo un espectáculo mediático que, gracias a la gran prensa, refuerza el ideario de la intervención del poder ejecutivo, en cabeza de Nicolás Maduro en la elección de la junta directiva de la Asamblea; sin embargo, los hechos son diferentes, lo que se dio fue la muestra de que el sector de Guaidó, que sigue a la sombra del Comando Sur y camina de la mano con la ultraderecha continental, empezando con el paramilitarismo colombiano, ya no es una alternativa dentro de la misma oposición venezolana.
Mientras tanto, el delirio de los Estados Unidos y la OEA les lleva a desconocer la realidad, pues salieron a respaldar la reelección de Guaidó como presidente de la Asamblea, con lo que dejan en evidencia su injerencia, pues el primer paso no debió ser el reconocimiento de la reelección, pues justamente la denuncia de Guaidó es sobre la invalidez de las elecciones, sino denunciando el proceso, reclamando que se repitiera o pidiendo veeduría internacional; y por el contrario, desconociendo a los otros actores de la oposición en la Asamblea, de entrada proclaman la reelección la junta de dicho organismo, en otras palabras, si no es Guaidó, no reconocen a nadie.