El ministro del Interior, Eduardo Bonomi, informó que las rapiñas descendieron 13,5 % entre marzo de 2015 y octubre de 2017, baja que fue más lenta entre noviembre y diciembre, 7,7 %. “El factor es la puesta en vigencia del nuevo Código del Proceso Penal”, puntualizó el jerarca durante su disertación en ADM. Como respuesta, el Parlamento analiza cambios a esta normativa y la secretaría de Estado ingresará más policías, adelantó.
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Bonomi participó en el almuerzo de trabajo “Acciones que permitirán mejorar la seguridad en Uruguay”, organizado por la Asociación de Dirigentes de Marketing (ADM), que se desarrolló este miércoles. Recordó que en 2015 se registraron 293 homicidios, lo que representa una tasa de 8,5 homicidios cada 100.000 habitantes. En 2017 la tasa se ubicó en 8,1 cada 100.000 habitantes, una baja de un 3,4 %. De enero a octubre de 2017 la tendencia disminuyó, pero a partir noviembre se registra un aumento rotundo de los homicidios.
También se observó este fenómeno en las rapiñas: en 2015 se registraron 19.435 y en 2017, 17.934, un descenso de 7,7 %. Pero si el dato se cierra en octubre, la disminución prácticamente se duplica, 13,5 %. “Al mirar lo sucedido en los últimos 18 meses podemos ver con nitidez el ‘efecto noviembre’. En los primeros 10 meses, el descenso de las rapiñas era claro y consistente, se acumulaban 1.574 rapiñas menos. El cambio de la tendencia se altera y se produce un incremento sostenido, que se mantiene”, describió.
Especificó que surgieron contradicciones en la práctica del Código, así como interpretaciones diversas sobre las nuevas funciones de la Policía, los fiscales y los jueces. A esto se sumaron actores que criticaron la implementación de los cambios, quienes funcionaron como portavoces de malestares más generales y de críticas con fundamentos ciertos, declaró. Además, los delincuentes interpretaron que la persecución penal sería más benigna, debido a una modalidad de la aplicación de la norma, lo que, en alguna medida, alentó conductas delictivas.
En su oratoria, reconoció el respaldo de todos los partidos políticos al nuevo Código y que la norma amplía derechos, también que presentaría efectos al comienzo de su implementación, tal como evidencia la experiencia internacional. Confía en que la cifra de delitos retome la tendencia a la baja con los cambios que el Parlamento analiza al Código, la incorporación de 500 efectivos de la Guardia Republicana y la ampliación del Programa de Alta Dedicación Operativa.