Luego de los conflictos con la presidenta del Instituto Nacional Inclusión Social Adolescente (INISA), Rosanna de Olivera de Cabildo Abierto, que le costaron su salida del organismo, Sandra Etcheverry asumió este miércoles en la Secretaría de Derechos Humanos de Presidencia. En diálogo con la prensa, se refirió a la impronta y a los objetivos de su gestión.
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La propuesta de la secretaria es trabajar con agentes de Derechos Humanos, con los Ministerios de Desarrollo Social y de Educación y Cultura; también con Cancillería.
Etcheverry aseguró que ya hay varias reuniones de trabajo planteadas, tanto a nivel nacional como internacional.
La flamante directora dijo que “cuando hablamos de derechos humanos” tenemos que recordar que “nuestro país fue pilar fundamental de convenios en tratados internacionales de la región”. Adelantó que trabajará con los diferentes organismos del Estado, como el Ministerio de Desarrollo Social, el Ministerio de Educación y Cultura y el Ministerio de Salud Pública, “pero también con la sociedad civil y las empresas”. “También con los privados de libertad, con los que esta secretaría tiene mucho que ver, tanto en adultos como en la minoridad. Ahí vamos a tender la mano y vamos a estar siempre presentes”, aseguró.
El cambio de lugar de Etcheverry forma parte de un enroque que decidió el presidente Luis Lacalle Pou, ya que quien estaba al frente de la Secretaría de Derechos Humanos, Rosario Pérez Perdomo, pasó a ocupar el cargo de directora del Inisa que dejó la dirigente blanca. Este miércoles, consultada en una rueda de prensa, Etcheverry negó que el motivo del cambio haya sido el conflicto con De Olivera. “Yo creo que el Inisa tiene que tener otra etapa. Nosotros ya dimos vuelta la página para seguir adelante y con el compromiso de estar en Presidencia”, sostuvo.